Cómo estarán de mal las cosas en el PRI-Gobierno donde empiezan a sacrificar a sus figuras emblemáticas para tratar de salvar el pellejo; como lanzar a la boca del volcán a hombres de larga carrera política y trayectoria en cargos públicos, mismos que habían formado parte de la estructura administrativa del país y su estado, como lo es Flavino Ríos, me surge la interrogante de saber en cuántas ocasiones él decidió por la libertad de alguien por cuestiones políticas, y si  fue así lo fue,  qué sentirá ahora que le toco ser sacrificado en la total deshonra del presidio, donde está pasando fríos, cuál fue su pecado para ser recluido en el centro de readaptación social de Pacho Viejo, donde ahora estará reunido con la crema y nata de la delincuencia veracruzana. Será que fue un sacrificio necesario, me pregunto o solo es otra de las acostumbradas cortinas de humo del sexenio peñista o víctima de otra cobarde traición a los viejos militantes, sobrevivientes de toda esta debacle.

El veracruzano oriundo de Minatitlán y avecindado en Xalapa, hombre de trayectoria que vio formarse y le tocó formar muchos cuadros políticos, quién se imaginaría que por seguir órdenes y alinearse pagaría el alto costo de la prisión. Flavino cuenta con antecedentes de una larga militancia Priista, además como de funcionario de los mejores niveles en el gobierno de su estado natal, parte de la crema y nata del viejo sistema político veracruzano con Miguel Ángel Díaz Pedroza, Julio Patiño, Dante Delgado Ranauro, Carlos Rodríguez, El Negro Uscanga, entre otros, integrante del último bastión de una generación de políticos de la vieja escuela del revolucionario institucional en el Estado de Veracruz, antes de la llegada de Patricio Chirinos donde inicia la caída libre del Estado y del PRI de Veracruz cuna de Ideólogos, Soñadores y Trabajadores de la escuela del Maestro Reyes Heroles. Para su desgracia a Ríos Alvarado le tocó bajar el telón de la telenovela veracruzana, el capítulo final para cerrar esta negra tragicomedia, enmarcada por la violencia, saqueo, desvío de recursos y otras situaciones graves creadas por el perverso Fidel Herrera, ejecutada a la precisión por Javier Duarte y su mujer Lady #SiMerezcoAbundancia que se llevaron el óscar de la corrupción con los papeles estelares.

¿Por qué no me trago esta, que puede ser una farsa más? Pues para fregar a Flavino Ríos se necesita mucho más que las graves acusaciones de encubrimiento, tráfico de influencia y abuso de autoridad, es más, le queda chica la pecera a este gran tiburón y no creo se atrevan a traicionarlo, Ríos Alvarado es un peso completo como el que necesitarían en este justo momento para desviar un poco la tensión y liberar presión, las encuestas del rival más incómodo del sistema, López Obrador va para arriba sin detenerse y esta cortina de humo representa la desesperación con la que tratan de tapar un poco el desastre que vive México hoy; para enjuiciar a Flavino, un hombre que guarda las llaves y los secretos de muchos años en el poder, operador rancio del sistema político de nuestro país son necesarios muchos más argumentos, pues no tienen los tamaños, no me hagan reír, porque cuando a ustedes señores del poder los llevaban a la escuela su mamá de la mano, Ríos Alvarado ya operaba para el Sistema Político Mexicano,  por eso, se me hace tan raro lo elijan a él para tapar el cochinero de la dupla Fidel-Javier en Veracruz que de carambola enloda todavía más, la triste y desastrosa administración de Peña; esta traición a modo o caracterización de una nueva obra teatral “Salvemos al Sistema de Justicia”, no es más que los pródromos de la tormenta que se avecina para este 2018 y que estamos próximos a observar los nubarrones de temporal para junio o julio del año presente.

Los estertores del muerto, marcan la hora, sin duda, este pronto será un cadáver, motivo por el cual  ya se están apresurando sus socios para darle el tiro de gracia y aprovechar para sepultar a culpables y cómplices junto con la evidencia de los malos manejos causa de la debacle actual, aquellos priistas, que ni tanto lo eran (ahora verdes y otros Morenos) los que cometieron agravios al sistema con el consentimiento de sus jefes, entre ellos, el culpable de moda, Peña, dejándolo solo y escapándose por la puerta de atrás rumbo al 2018 cobijados por otros colores.

En este preciso momento existe un raro efecto contagioso, este se puede observar en algunos estados, como Quintana Roo, dónde ahora hay un gobierno de coalición que busca desesperadamente contrarrestar y superar los obstáculos con la finalidad de instaurar  un orden de inicio que les permita trazar una trayectoria de éxito económico y desarrollo, que tiene que luchar contra los efectos secundarios de las prácticas que en 18 años engendraron los gobiernos en turno, costumbres que quedaron sembradas y arraigadas, creadas por un hermético y cupular sistema local autoritario, simulador de bienestar, que se regía por el culto a la personalidad al estilo del viejo Egipto; esa forma de gobernar causó un daño irreversible a la sociedad, a la economía y a las instituciones, con un desfalco y deuda estratosférica y catastrófica, que deja muchas aristas, difíciles de superar a mediano plazo, un sistema entrampado por la quiebra que  hoy aunado a la falta de experiencia, cuotas y compromisos políticos, se está convirtiendo en la más pesada carga que enfrentan sus nuevos administradores del sistema.  Sin quitar el dedo del renglón, deben tener mucho cuidado los del gobierno actual y no dejarse endulzar, ya que este raro efecto político-social es aprovechado por muchos(as) cartuchos quemados que buscan incrustarse y seguir gozando de los beneficios y bondades del Poder.

En los últimos días podemos observar, cómo en las tribunas buscan reivindicarse con los nuevos jefes, aquellos que blasfemaban, señalaban y mentían para denigrar la imagen de la persona con quien ahora quieren estar cerca y hasta bailar la quebradita; se puede notar cómo increíblemente de manera camaleónicamente dieron un giro de 180 grados revelándose, traicionando y hasta vendiendo a sus creadores y benefactores, aún recuerdo cuando eran las favoritas(os) de los señores del poder, ¿dónde quedaron aquellos, Félix y Beto? ¿En qué fallaron estos dos, si les dieron todo? Me pregunto, pues ellos los(as) acercaron a la teta, los hicieron ricos y les enseñaron a degustar de las mieles del poder, simplemente, así, se olvidaron de ellos y ahora van a otra capilla y rinden culto a otra religión; qué triste ver cuando el poder se acaba, cómo están mostrando la cara real, algunos(as) de los aprendices, cómplices y cercanos al corazón, de Félix González y Roberto Borge, si, esos mismos, aquellas obras de arte creadas a la necesidad Política del momento, esos(as) hoy se salen por completo de control, por su avaricia desmedida, pateando el pesebre como dicen los viejos cafeteros de radio bemba cuando se refieren a los que traicionan a sus maestros, benefactores y hasta tíos.

¿Así cómo no van a hundir su partido? Sólo llevan agua para su molino y no conocen la disciplina. Decía la abuela Ana, ¡eso solo lo ves en la política de rancho! No saben tejer fino.

Un clima enrarecido existe hoy en todo el país, donde en algunas zonas es más evidente por lo que se podrán observar con mayor frecuencia manifestaciones que van de lo sublime a lo ridículo; consecuencia vacíos de poder del momento, estos mismos efectos son los que han fomentado el caudillismo actual y de moda, líderes de pasarela, dónde vemos nuevas figuras ciudadanas subirse a la tribuna y robarse el espectáculo, que sin duda, eso les asegurará un boleto de primera fila para los espacios políticos del 2018 en México.

Quintana Roo, lugar de esperanza, vemos cómo la voz ciudadana acusa con dedo flamígero los actos de corrupción de pasadas administraciones y que alcanza a algunos políticos y empresarios de la actualidad, hecho suficiente para poner las barbas a remojar; entre los más sonados el caso de un empresario de Playa del Carmen Quintana Roo, que con valor se lanza para denunciar hechos de corrupción no solo en la ciudad donde radica, con pruebas en otras partes de ese estado, el señor  Mimenza, encabeza las planas noticiosas y se hace notar como elemento de cambio fortalecido por el valor de denunciar, cosa que en México no se acostumbra. “Por eso estamos como estamos”. Sus señalamientos de corrupción alcanzaron primera plana nacional, ocupando también los espacios de audiencia de noticias locales, redes sociales y rumorología de los lugares de mayor confluencia social, por el gran escándalo que ha desatado y por los peces gordos implicados.

Sin duda este 2018 es muy prometedor y asegura un cambio, esperamos sea a la medida de lo que México necesita, los ciudadanos despiertan y es el fenómeno que debemos de cuidar y respaldar, ya que un cambio verdadero debe incluir a todos los sectores, iniciando por personas comunes como usted y yo.

Eduquemos a los niños hoy para cambiar a la sociedad, la corrupción inicia en casa con nosotros, demos valores y principios a nuestros hijos, México lo merece, 2018 año de la esperanza, vamos al frente.