Ceguera de Anáhuac, la región menos transparente. Aterrizaje, hotel Majestic, Catedral y Palacio Nacional. Venir del extranjero empuja. Ya no Fe, ni Lomas ni Polanco ni Reforma, ahora de nuevo Centro, como el poema de Octavio Paz de San Ildefonso. Esa búsqueda circular. El portal de mercaderes me atrapa, el regreso destruye. ¿Por qué ser tan indignos?
No entiendo la tirria del grupo de Letras Libres contra el presidente Andrés Manuel López Obrador, menos entiendo la crítica que no es crítica contra Beatriz Gutiérrez. Guillermo Sheridan sigue jodiendo con minucias. Su reciente artículo trata de justificar un tuit demeritorio. Estoy convencido que los tuits dan la perfecta ignorancia o inteligencia. El tuit es pulsión o no es.
Sheridan trata de diferenciar el trabajo profesional de Beatriz de la esposa consorte. El de Saltillo siempre trae cadillo, no lo logra. provinciano, su crítica es de provincias. Le gana la jodidencia, su tuit fue ofensivo, inapropiado de alguien que ha dedicado su vida a estudiar la libertad de Octavio Paz.
A confesión de parte, trata de justificar con su artículo de El Universal su postura discriminatoria en contra de Beatriz. Engolado, reconoce a la doctora porque coincide con sus lecturas. Seriedad, Memo, ya no mames. Y aunque Bea trate de explicar o mentir, neta que Amado Nervo era mamoncito.