Carstens se me perdió la monedita.
Jocosa versión de “La Cadenita”, muy bailable y rítmica, en la que se narra cómo es que a los mexicanos nos vuelven a “llevar al baile”, con la devaluación del peso frente al dólar. Aunque lo parezca, no hay tambora en la instrumentación, se trata del gobernador del Banco de México Agustín Carstens moviendo "el botellón”.
Humberto el bailador.
¡Ya llegó, ya llegó!… ¡ya llegó Humberto el bailador! Divertida cumbia que nos cuenta las peripecias de Humberto Moreira en tierras españolas, evadiendo a la justicia ibérica con el pasito T.U.N. – T.U.N. (Tengo Uñotas Notables). Imagínese a Humberto como todo un maestro de las pistas… ¡desapareciendo todas!
Mi amigo Bronco.
Triste cumbia que nos narra cómo quedó difunto políticamente Jaime Rodríguez “El Bronco”, luego de lo sucedido en el penal de Topo Chico. Se murió mi amigo “Bronco”, se nos fue al más allá… de las encuestas. Inolvidable aquella parte de la canción que dice: “tuvo patas de oro y de papeeel”; y es que su atrabancada forma evidenciaba su manera de hacer todo “con las patas”, pero obviamente también con papel, sí con el papel de aparentar ser muy Bronco, pero resultó todo un “Sheriff de chocolate”.
Suavecito.
Alegre melodía antiguo éxito de “La Tesorito” Laura León, que nos detalla la forma “suavecita” en la que El Papa Francisco se expresó ante la terrible y devastadora situación en México, haciéndose pendejo ante los espinosos temas como Ayotzinapa, Tlatlaya, Veracruz, Guerrero, La Casa Blanca, etc. “Se las voy a cantar suave-ci-tooo… ¡suave-ci-tooo, suave-ci-tooo!”.
Eric Fernández.
@fdezeric