El pasado 19 de septiembre, sin duda la Ciudad de México, habitantes y estados colindantes, sufrimos una de las experiencias más terroríficas de los últimos tiempos, al menos a mí no me tocó el terremoto del 85 y tal vez pensaba que los adultos se equivocaban o eran demasiado exagerados, hoy acepto que pequé de soberbia.

Durante las primeras semanas, la solidaridad se hizo notar entre la ciudadanía, incluso de manera internacional, sin embargo el ser humano por naturaleza tiende a olvidar y a volver a pensar en sí mismo sin importar los demás y su seguridad.

Por vecinos de la Delegación Benito Juárez me he enterado de diversas construcciones que no cuentan con la revisión por parte de Protección Civil o la Secretaría de Obras, (desconozco a quién le corresponde en realidad dicha tarea), pero existe un caso en especial que varios vecinos me han pedido denunciar ya que se encuentran aterrados, porque en el edificio situado en la Calle de Holbein número exterior 134, Ciudad de los Deportes, desde el pasado 17 de octubre del año en curso, se realiza una remodelación en el departamento 402, en la cual han derribado al menos un muro de carga, cabe destacar que a pesar de las múltiples peticiones por parte de los condóminos, Protección Civil no ha realizado una revisión de las condiciones del inmueble,  los encargados de la obra no cuentan con los planos estructurales, tampoco con los permisos necesarios para hacer el derribo de muros de carga, dichas irregularidades ya fueron denunciadas ante la Delegación Benito Juárez con folio 37022, aún sin obtener respuesta por parte de las autoridades.

Dichas irregularidades y el caso omiso de la demarcación apuntan hacia un sospechosismo comunitario y la preocupación de los condóminos por su patrimonio y sobre todo por el peligro que corren sus vidas al no tener la certeza de un certificado por parte de las autoridades donde se indique que la obra se encuentra: 1.- Con los permisos necesarios para derribo de muros de carga, 2.- un dictamen que apunte a que dicha remodelación no pone en peligro la estructura del edificio, 3.- el edificio fue construido en 1973.

Como vecina de la demarcación me encuentro en la obligación de denunciar ante medios estas anomalías. ¿Qué es lo que tiene que suceder para que los vecinos seamos atendidos? ¿Una desgracia más? Nuestra ciudad aún se encuentra , y se encontrará por varios meses, si no es que años en reconstrucción, reconozco los grandes esfuerzos del Gobierno Central, del Doctor Mancera, de la Consejería Jurídica, del INVEA, y demás instancias gubernamentales  para la atención de diversos temas relacionados con la terrible situación que vivimos el día 19 de septiembre.

Al Delegado Christian Von Roehrich hago un atento llamado para que inicie las averiguaciones correspondientes y seguimiento a este riesgoso asunto.

Me preocupa como ciudadana, que nos sentimos solos y abandonados ante circunstancias en las que se ha solicitado apoyo por varias vías a nuestras autoridades, siendo ignorados.

También hago un llamado a que los ciudadanos no tengamos miedo de proteger nuestros patrimonios, a seguir ayudando en la reconstrucción, esto es un binomio Gobierno-ciudadanía,  que no se nos olvide nunca la empatía y solidaridad que vivimos durante las primeras semanas, México es más grande que la corrupción de algunos, ya lo demostramos.

Contacto tw: @laultimaleona

Lic. Ivonné Teresa Corral

Ciencias Políticas y Administración Pública, Universidad Iberoamericana, Santa Fe.