Para el equipo del presidente electo Andrés Manuel López Obrador, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) tendría los días contados una vez que tome protesta en la sede de la Cámara de Diputados este primero de diciembre.

Con la ayuda de los legisladores federales de la coalición política que lo llevó a la silla presidencial (Morena, Pt y PES) la conclusión de los trabajos de dicha Comisión darían la entrada a lo que podría llamarse la “Defensoría del Pueblo”, figura que existe en otro países del mundo.

“En concordancia con la cuarta transformación que propone el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, la CNDH debe transformarse a fin de dar luz a la Defensoría del Pueblo”, así lo afirmó Alfredo Rojas Díaz Durán.

El especialista en la materia y reconocido activista a nivel internacional por las diversas Misiones de Paz que ha realizado en todo el mundo, adelantó que dentro de la pacificación del país, este ente que vela por las garantías individuales debe rediseñarse y alcanzar un estándar democrático, para erradicar los rasgos autoritarios del Estado.

“Un espacio de defensa ciudadana, otorgándole la autonomía y las facultades suficientes para hacer respetar los derechos ciudadanos y se reparen los daños ocasionados ante una diversidad de violaciones”, expresó el defensor del pueblo.

Ante la difícil situación que padece el país, producto de gobiernos erráticos y sanguinarios, la creación de la Defensoría del Pueblo, deberá tener bajo su jurisdicción como ente autónomo las áreas de la Memoria, la Verdad, Fiscalización y Gestión, que hoy la Comisión carece y que son fundamentales para el desarrollo democrático del país, dijo.

Dicho cambio, agregó Rojas Díaz-Durán, debe reparar sus funciones garantizar que se lleven a cabo crímenes de lesa humanidad, de guerra, perseguir a productores y distribuidores de armas de fuego que distribuyen sus artefactos al crimen organizado.

“El trabajo de la Defensora del Pueblo en ambas Cámaras del Congreso de la Unión será indispensable para acabar con el flagelo que ha paralizado a todo el país, la violencia incontrolable”, expresó.

Aplaudió la reciente propuesta que presentó el senador Alejandro González Yáñez, a nombre del Partido del Trabajo, para finiquitar la figura de “Comisión Nacional” y pasar a una verdadera Defensoría del Pueblo “que sea autónoma  y que sus decisiones sean vinculatorias. Así como desaparecer a los titulares estatales, que han servido como ombuds-brothers. La cuarta Transformación pasa por la transformación de este organismo simulador para garantizar los derechos plenos a los gobernados y fortalecer la esencia democrática del Estado”, dijo. 

Punto Cero | A tiempo de evitar una crisis en el país por desabasto de agua: Conapro

La Confederación Nacional de Profesionistas y Jóvenes de México (Conapro) pidió a la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador impedir la sobreexplotación de los mantos acuíferos en el país, a fin de garantizar el derecho de acceso al agua para uso personal y doméstico antes de concesionar su extracción a particulares.

De continuar esta tendencia habrá un riesgo inminente para garantizar el vital líquido a los 119.5 millones de habitantes del país, en especial para los 60 millones que se abastecen de los 105 acuíferos sobreexplotados, pero sobre todo para abastecer a las generaciones futuras más modestas del país, advirtió su presidente, Silvio Octavio García Rodríguez.

Recordó que la presente administración federal (de Enrique Peña Nieto) modificó el “estatuto de las vedas existentes sobre 40 por ciento de las cuencas del país, —que contienen 55 por ciento de las aguas superficiales de la nación— y eliminó la prohibición que había para la entrega de permisos de extracción de agua en las cuencas, con el pretexto de que servirían para establecer reservas de agua para áreas naturales protegidas y la naturaleza para los próximos 50 años”.

“Si bien los Decretos de manera directa no privatizan el agua de las cuencas mencionadas, con esta modificación legal se abre la posibilidad para que sea concesionada y con ello negar el derecho al agua a cientos de comunidades y millones de mexicanos”, dijo.

García Rodríguez explicó que en México se extrae 60 por ciento más agua de la que se infiltra a los acuíferos, por lo que 16 por ciento de estas reservas subterráneas ya presentan condiciones de “franca sobreexplotación”; 40 por ciento están contaminados con tóxicos altamente dañinos (incluso radioactivos); otro 18 por ciento se ha contaminado por infiltración salina, y 191 cuerpos de agua superficiales (ríos, lagos, lagunas) se consideran en serio proceso de deterioro.

Estamos en las manos de los próximos funcionarios que llevarán las riendas del país durante los próximos seis años, sin embargo, no debemos de olvidar que acabamos de pasar por una crisis en el abasto del líquido en la zona metropolitana del Valle de México que hizo entrar en crisis a varios sectores productivos; y sólo fueron ocho días.

*Periodista mexicano | @JoseVictor_Rdz