El tema de los migrantes sigue dando tela de donde cortar. Su paso por nuestro país, sin duda, desata varios dimes y diretes, así como opiniones encontradas.

Y no es para menos. El tema es de alta repercusión social.

En su paso por Oaxaca, se sabe, la llegada de los centroamericanos ya desató una turbulencia entre los concesionarios de transporte público.

Y es que ante la inminente llegada   de la “caravana migrante”, concesionarios del servicio público colectivo de transporte de pasajeros, urbanos, suburbanos y turístico de la Ciudad de Oaxaca y municipios conurbados decidieron no rentar ni prestar sus unidades a las personas que conforman el convoy.

En un comunicado, señalaron que esta acción permite proteger y garantizar la atención a la sociedad oaxaqueña que día a día utiliza el servicio para sus diversas actividades que generan estabilidad y desarrollo, “así como también proteger nuestro patrimonio, la seguridad de nuestras unidades y de la ciudadanía”.

“Al ser nosotros transportistas legales, es nuestra obligación el cumplimiento de las Leyes del Transporte de nuestro país; fijamos ante ustedes nuestra postura, de anteponer los intereses de la ciudadanía oaxaqueña antes que de cualquier otro”, manifestaron en un breve texto.

Cabe destacar que la caravana de migrantes pidió a los gobiernos de Oaxaca y la Ciudad de México ayuda para transportar a la capital del país a los entre 5 mil y 7 mil integrantes del grupo que ya viene seguida de otra más.

Se dice que sobre bolsas de plástico y cartones, la mayoría de los migrantes centroamericanos pasaron la noche en el municipio de Juchitán, Oaxaca, donde han decidido permanecer durante este miércoles hasta que resuelvan el tema del transporte que los lleve hacia la Ciudad de México.

Estaremos atentos a este tema.