Vaya momento el que se vivió en el Audi Field de Washington D.C. donde el mítico delantero inglés, Wayne Rooney, se mandó un auténtico partido de antología no solo al evitar el gol del triunfo del equipo rival, sino al dar la asistencia de la victoria de su cuadro ante el Orlando City. 

Y es que cuando parecía que el partido terminaría con un empate a dos goles, el DC United decidió apostarlo todo por el triunfo, por lo que en un tiro de esquina al minuto 95 mandó hasta al arquero. 

Sin embargo, el centro no fue bien cobrado, por lo que el balón quedó en los pies de un jugador del Orlando City, quien al cruzar el medio campo se disponía a sentenciar el partido, pero no contó con la presencia de Wayne Rooney, quien hizo una jugada digna de videojuego, pues corrió y se barrió para recuperar el esférico y después mandar un centro largo para que el argentino Luciano Acosta rematara de cabeza y pusiera el 3-2 final. 

Sin duda una jugada de sacrificio y profesionalismo por parte del que fuera en su día uno de los mejores jugadores del mundo y que ahora se encuentra derrochando talento en el futbol de la MLS.