México.- En el futbol importan tanto las formas como el resultado, máxime si el juicio en cuestión recae sobre Brasil, nación que perfeccionó el juego que inventaron los ingleses en las fábricas hace más de un siglo.
Los amantes del ganar por ganar dirán que esta noche en Sao Paulo el Scratch du Ouro le cumplió a su afición, pues no sólo ganó su partido de debut en Copa América, cuya sede es precisamente el país amazónico, sino que además goleó 3-0 a Bolivia, que junto a Perú y Venezuela, que mañana entrarán en acción, integran el Grupo A del certamen.
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Sin embargo, quienes crecieron con aquella brillante generación de Pelé, Garricha, Jairzinho, que dejó 3 títulos del mundo para la causa brasileña, o aquella de España 82 comanda por Sócrates que, aunque no ganó la Copa del Mundo, vaya que enamoró, se sentirán defraudados de ver a la Canarinha versión 2019, toda vez que es muy parca y gris.
Y es que el equipo de Tite dista mucho de contar con la magia de esos ídolos y tampoco se acercan a futbolistas como Ronaldo, Romario, Rivaldo, Ronaldinho, que divirtieron a miles en los 90. Pero eso sí, la oncena que soy se plantó en el Morumbi demostró ser efectiva y contundente.
Fue el VAR, que se utiliza por vez primera en esta competición, el mejor instrumento de los brasileños, ya que gracias a su intervención Néstor Pitana decretó una pena máxima debido a una flagrante mano de un boliviano, misma que hizo válida Philippe Coutinho, todo esto al minuto 49.
Casi de inmediato, el propio jugador del Barcelona volvió a decir presente con la cabeza luego de un gran pase de Roberto Firminho, quien tras esa acción dejó su lugar en la cancha para que entrara Gabriel Jesús; mientras que Everton cerró la cuenta con un zapatazo formidable que venció la cabaña rival.
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De esta manera Brasil arrancó positivamente la Copa América, mas este combinado deberá incrementar su nivel de juego de inmediato si es que no quiere ser echado en las rondas finales a las primeras de cambio.