Arte pura fue la que se vivió en el partido entre Hull City y el Rotherham correspondiente a la Segunda División de Inglaterra. Y es que cayó uno de los mejores goles del año, unos dicen que del siglo, pero quedó marcado por algo negativo.

Vayamos por parte y primero describamos el gol que, como muchos apuntaron, tiene más que ver con un poema que con una anotación debido a lo estético que resultó la jugada en favor del Hull City de la Premiership.

Corría el minuto 71 en la cancha del Rotherham cuando al jugador Jaden Philogene le llegó la inspiración e hizo un gol digno de antología.

Pues una vez que recibió la pelota dentro del área rival, Jaden Philogene se puso el traje de mago e hizo un tremendo túnel al zaguero, que se aferró y volvió a la marca solo para volver a ser destrozado con un brutal amague.

Acto seguido, Philogene sacó de nuevo la chistera al hacer un remate de rabona, mismo que permitió que la pelota se incrustara en el ángulo.

Reglamento “borra” el gol del siglo de Jaden Philogene

Las reglas sirven para que los juegos tengan sentido; sin embargo, en ocasiones también pueden resultar ilógicas, tal como ocurrió en este gol del siglo clavado por Jaden Philogene.

Y es que la Premiership le dio el gol a Cameron Humphreys, zaguero del Rotherham, quien realizó un ligero desvío que terminó por modificar la trayectoria de la esférica.

Por ende, la anotación fue catalogada como gol en contra y el anotador no fue otro que Cameron Humphreys, más allá de que en la cabeza de la afición quedara Jaden Philogene como el verdadero autor de ese tanto favorable al Hull City.

Recordemos que el reglamento indica que, si el balón no va con dirección de portería y este es desviado, el gol en cuestión deberá etiquetarse como gol en contra.

De modo que la burocracia terminó con el poema de Jaden Philogene. Pero eso sí, la verdad es que la acción fue digna del Premio Puskás, que reconoce al mejor gol de la temporada.

El verdadero gol del siglo

Cada que cae un gol los fans solemos emocionarnos y lanzar calificativos que en ocasiones pudieran resultar desproporcionados.

Cabe señalar que para muchos, el verdadero gol del siglo, eso sí, del 20 y no del 21, fue el gol que metió Diego Armando Maradona en el Mundial México 86 ante Inglaterra, en elc ual se llevó hasta asu sombra.

En el siglo 21 no ha existido un gol así, en esas circunstancias, y con tan nivel de estética y eficacia, al menos no uno que cause consenso a nivel general.