¿Quién más que André-Pierre Gignac? El mítico delantero francés volvió a demostrar la enorme calidad y sobre todo su gran liderazgo al cargarse a los Tigres al hombro y conseguir no solo el gol del empate, sino también el de la voltereta en cuestión de minutos en el duelo ante el Ulsan Hyundai, correspondiente a su debut en el Mundial de Clubes. 

Gignac ya había avisado con un disparo de media distancia, aunque fue el cuadro del Ulsan el que se adelantó en el marcador al minuto 24 con un gol de Kim Kee-Hee. El delantero francés reaccionó de inmediato con un disparo de tiro libre que estrelló en el travesaño y que provocó un tiro de esquina. 

Justo en esa jugada a balón parado, el delantero francés aprovechó un desvío dentro del área para empujar el esférico al fondo de las redes y así conseguir el tanto del empate antes del medio tiempo. 

Gignac consiguió la voltereta para Tigres

Tigres siguió presionando en busca del segundo gol antes del descanso del medio tiempo y fue así como en un tiro de esquina aprovecharon un garrafal error de un defensa coreano que cometió un mano clara en el área, a lo que el árbitro marcó la pena máxima. 

Como era de esperarse, Gignac fue el encargado de cobrar desde los 11 pasos, sacando un potente disparo raso y cruzado a la izquierda que dejó sin posibilidades al arquero del Ulsan Hyundai. 

Los Tigres de Gignac, a 45 minutos de avanzar a las semifinales del Mundial de Clubes

Los Tigres se encuentran a sólo 45 minutos de avanzar a las semifinales de su primer Mundial de Clubes, siempre y cuando mantenga la ventaja conseguida por Gignac ante el Ulsan Hyundai. 

De vencer al cuadro de Corea del Sur, el conjunto de Monterrey avanzará a la antesala de la gran final, instancia en donde se mediría al Palmeiras, flamante campeón de la Copa Libertadores. 

Antes de pensar en el equipo sudamericano, Tigres deberá saltar concentrado para el segundo tiempo frente al Ulsan, equipo que dejó claro que es más que peligroso gracias a los jugadores tan veloces con los que cuenta.