Un toma y daca es lo que hubo entre Julio César Chávez y David Faitelson, se dijeron de cosas durante varios días y parece que ya terminó todo, pues una amistad se rompió.
Pero antes de todo, tenemos que repasar toda esta novela que comenzó debido a un hijo de Julio César Chávez Jr y que criticó David Faitelson.
Resulta que Omar Chávez iba a pelear en Pachuca, pero de última hora se cancelo la pelea, ya que Misael Rodríguez no se presentó al ring.
La razón fue que el hijo de La Leyenda pesó más de los establecido, por lo que su rival no quiso pelear, aún cuando todo ya estaba puesto.
Así comenzó la pelea entre Julio César Chávez y David Faitelson
Por supuesto que Julio César Chávez se molestó de gran manera que Misael haya cancelado la pelea, por lo que en redes sociales se dedicó a mandar mensajes que David Faitelson no dudó en responder.
David Faitelson aprovechó la situación para dar su opinión y en primer instancia comentó lo siguiente: “En el boxeo, un kilo de más, un kilo de menos, puede marcar la diferencia en una desgracia sobre el cuadrilátero. Sí Omar Chávez no cumplió con el peso establecido en la rehidratación, Misael Rodríguez y Robert Garcia hicieron muy bien en retirarse. Para que entiendan bien los dirigentes y promotores: la TV y los aficionados en la arena no son más importantes que poner en riesgo la vida de un ser humano…”.
Esa fue la chispa que prendió a Julio César Chávez que le respondió: “Así que con todo respeto no hables pendejadas sin fundamentos y sin investigar, ¿ahora resulta que un boxeo tiene que pesar exactamente lo que su oponente quiera el mismo día de la pelea? No juzgues a mis hijos por su pasado eso no se vale y no lo permitiré”
Julio César Chávez, con el corazón roto por culpa de David Faitelson: “Yo sí te consideraba un amigo”, le dice
Después de ese toma y daca, la pelea en redes sociales entre Julio César Chávez y David Faitelson duró días, a tal grado que se comenzaron a decir cosas personales.
Pero este 8 de octubre, todo se rompió dentro de Julio César Chávez, ya que le comentó que la amistad estaba rota: “qué bueno saberlo yo sí te consideraba un amigo de hoy en adelante no te dirijo la palabra no hasta pronto sino hasta nunca que la sigas pasando bien”.
Por supuesto que David Faitelson no se quedó sin contestar: “Julio: no confundas la amistad con el trabajo. Si fueses mi amigo, separarías una cosa de la otra. Yo no puedo tener “amigos” en el medio porqué cuando debo criticarlos nada puede “nublar” mi criterio. Ni hablar. Si no me quieres hablar, no hay problema. Allá tú y tú consciencia…”
Y así de rápido y fácil se rompió una amistad.