México.- La jugadora noruega Ada Hegerberg hizo historia al convertirse en la primera mujer que gana un Balón de Oro. Hecho que simboliza la reivindicación del balompié femenino frente al histórico dominio -machista- del futbol masculino.
Pero llegar a la cima no fue fácil para Hegerberg, pues como es costumbre, tuvo que sortear demasiadas vicisitudes en una disciplina que hasta hace no mucho era calificada erróneamente como el “juego del hombre”.
“Noruega ha tenido un gran pasado en el fútbol femenino, pero las chicas no tienen las mismas oportunidades que los chicos y eso lo hace más difícil”, comentó hace meses para The Guardian.
Por ello, la actual delantera del Olympique de Lyon, quien, además de ganar la Champions League 2018, marcó 31 goles en 29 partidos, agradeció a sus compañeras y directiva del club por el apoyo que le han dado al futbol femenino.
“Quiero dar las gracias a mis compañeras de equipo, porque sin ellas todo esto no habría sido posible. Gracias a mi club, a nuestro presidente, Jean-Michel Aulas, gracias por lo que haces por el fútbol femenino”, comentó tras se reconocida.
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Hegerberg, de 23 años, comenzó su periplo futbolístico en 2012 con el Kolbotn Fotball de su país natal, luego fichó por el Stabæk FK y, a tres temporadas de su debut, pasó a engrosar las filas del FFC Turbine Potsdam de Alemania.
Sin embargo, fue en Lyon donde logró su consagración como la máxima exponente del planeta al ganar 4 Ligas de Francia, tres Copas Nacionales y, por si fuera poco, se ha embolsado tres Orejonas. Asimismo, computa más de 250 dianas en su corta pero laureada trayectoria.
Lamentablemente, en el apartado internacional no le ha ido tan bién, pues en 2017 renunció abruptamente a su Selección tras una pésima Eurocopa y tensiones con federativos así como con algunas de sus compañeras.
“La cuestión no es si yo tengo que cambiar de opinión. La cuestión es sobre todo lo que la federación y el equipo nacional deben hacer para mejorar. Y ahí hay camino que recorrer.
“Si el equipo nacional quiere alcanzar los objetivos y los resultados fijados por el cuerpo técnico necesita, en mi opinión, mejoras en varias materias como la planificación, la ejecución y el seguimiento”, explicó para la cadena NRK luego de recibir cientos de mensajes que pedían su vuelta.
Aunque, quizá, sus declaraciones más sustanciales fueron lanzadas cuando cerró su discurso con el Balón de Oro en sus manos: “Quiero acabar con un mensaje a todas las niñas y jóvenes: crean en sí mismas, no paren nunca”.
Palabras que sin duda alguna conmoverán a más de una, toda vez que las mujeres siguen enfrentando adversidades a la hora de querer incursionar en un deporte que tradicionalmente era practicado sólo por varones, inclusive, la propia Hegerberg fue víctima del machismo y sexismo que prevalece en la sociedad, ya que durante la gala de premiación el DJ Martin Solveig le preguntó si sabía hacer “twerking” (perrear).
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Fotos: @AdaStolsmo