Brian Flores, exentrenador de los Miami Dolphins, demandó a la NFL por racismo e intento de amaño de partidos, noticia que ya ha provocado un auténtico escándalo.
Hijo de hondureños, Brian Flores es un coach que se ha abierto paso en la NFL, aunque le ha costado más de lo habitual debido a sus orígenes.
Nacido y criado en Brooklyn, Nueva York, Brian Flores jugó futbol americano a nivel universitario durante su estadía en el Boston College.
Se desempeñaba como linebacker y parecía tener futuro en la NFL, pero una lesión le frustró el camino como jugador, aunque no como entrenador.
Desde joven, Brian Flores mostró una peculiar habilidad para leer el juego, lo que le permitió llegar a la NFL por una puerta no tan común.
Brian Flores y sus inicios en los New England Patriots
En 2004, con 23 años de edad, Brian Flores ingresó a la organización de los New England Patriots como uno de sus muchos asistentes de quienes detectan talento universitario.
Se desempeñó en ese rol durante tres años, hasta que el legendario coach Bill Belichick lo detectó y le otorgó un ascenso a su staff, como asistente del entrenador de equipos especiales.
Durante una década, Brian Flores tuvo un gran ascenso dentro de los Patriots, al ser también asistente de la defensiva, coach de safeties y linebackers, por lo que se volvió pieza clave en la obtención de cuatro títulos de Super Bowl.
Brian Flores y el salto a los Miami Dolphins
La buena labor de Brian Flores en los Patriots hizo que los Miami Dolphins se fijaran en él y lo contrataran como su entrenador en jefe para la temporada 2019.
Aunque no clasificó a los playoffs, hizo de los Dolphins un equipo competitivo de nueva cuenta. Su primera campaña no fue buena, al concluir con récord de 5-11.
Sin embargo, la de 2020 representó un cambio total: culminó 10-6 y se quedó muy cerca de la postemporada, al igual que en la actual, donde Miami finalizó con foja de 9-8, a un triunfo de avanzar.
Sin embargo, fue despedido de forma sorpresiva y ahora ha demandado a la NFL porque parecía que sería contratado por los New York Giants y al final no sucedió. Asegura que el acuerdo no se cerró “por motivos racistas”.