Mesut Özil anunció este domingo que no jugará más con la Selección de Alemania debido al “racismo” que ha sentido en las críticas que recibió por posar en una fotografía junto al presidente turco Recep Tayyip Erdogan.
A través de una extensa carta difundida en redes sociales, el jugador del Arsenal dio a conocer su decisión; asimismo, dio a conocer la verdad del porqué se tomó la fotografía que fue el centro de atención durante toda la Copa del Mundo y en la que también apareció su compañero Ilkay Gundogan.
"Con mucho dolor y después de muchas consideraciones sobre lo acontecido, no seguiré jugando para la selección alemana mientras tenga este sentimiento de racismo e irrespeto”, escribió el futbolista alemán, quien ha sido pieza clave en el equipo dirigido por Joachim Löw.
"Para mí, hacerme una foto con el presidente Erdogan no tiene nada que ver con la política o con las elecciones, sino con el respeto hacia el máximo cargo del país de mi familia”, explicó.
Y es que la foto levantó mucha polémica en Alemania, sobre todo por la tensión que se ha vivido entre el país germano y Turquía después del golpe de estado fallido a Erdogan en julio del 2016.
"Soy consciente de que la foto provocó grandes reacciones en los medios alemanes, pero a pesar de que algunas personas pueden acusarme de mentir o ser deshonesto, la foto no tenía ninguna intención política”, señaló el futbolista de 29 años.
Por último, el mediocampista campeón del mundo con Alemania en Brasil 2014 cargó fuerte en contra de Richard Grindel, presidente de la Federación Alemana de Futbol (DFB), pues aseguró que mientras él intentaba explicarle las razones de la fotografía, el directivo solo tomaba una posición política y rebajaba las opiniones del futbolista.
"Mientras que intentaba explicar a Grindel mi herencia, mis antepasados y, como consecuencia, hacerle comprender las razones que me llevaron a hacer esta foto, él estaba más interesado en hablar de sus propias posiciones políticas y de rebajar mi opinión”, agregó.
"Para Grindel y sus apoyos, soy alemán cuando ganamos, pero un inmigrante cuando perdemos”, finalizó.