Ibrahim Ehren, director general de la televisión pública turca está en la mira de Europa luego de que hiciera pública su opinión sobre la diversidad sexual en el uno de los concursos de canto más importantes del mundo: Eurovisión.  

Refiriéndose a Conchita Wrust, la ganadora del certamen en el 2014, declaró que como emisora pública no puede difundir, "a las nueve de la noche, en horario infantil, a un austriaco con barba y falda que no acepta su sexo, que no admite pertenecer a ningún sexo y que asegura ser a la vez hombre y mujer".

Pero eso no fue todo, Ehren se permitió decir a la Unión Europea de la Radiodifusión lo siguiente: "Se han desviado de sus valores. Ahí hay un caos mental. Si eso se corrige, volveremos a Eurovisión". 

Sin embargo, usuarios de Twitter rápidamente respondieron diciendo que quien debe cambiar su mentalidad es él.