El caso de Manuel Guerrero —mexicano detenido en Qatar por su orientación sexual— resaltó los peligros que corren las personas de la población LGBT en prisión.
Desde hace más de un mes de la detención de Manuel Guerrero en Qatar sólo por ser homosexual, el 4 de febrero de 2024, familiares y activistas han acusado que ha sido víctima de tortura y malos tratos dentro de la cárcel.
Embajadas “se pasan la bolita” en caso Manuel Guerrero
Si bien las Embajadas del Reino Unido en México y la de México en Qatar deberían interceder por Manuel Guerrero, al ser de nacionalidad mexicana y británica, la que ha tomado las riendas del caso ha sido la británica.
En entrevista para SDP Noticias, Enrique Guerrero —hermano de Manuel— comentó que en un inicio la Embajada del Reino Unido en México canceló la reunión con él “de manera arbitraria y unilateral”, misma que estaba programada para el lunes 4 de marzo y donde se le daría seguimiento y atención al caso.
Ante dicha repentina situación, activistas instalaron un plantón frente a la sede diplomática británica en Ciudad de México, que finalmente terminaría siendo levantado luego de que autoridades del Reino Unido accedieron a una reunión para el miércoles 6 de marzo.
Caso Manuel Guerrero: Riesgos de la población LGBT en prisión
La Asociación para la Prevención de la Tortura (APT) indica que las personas LGBT en detención se encuentran en riesgo latente de sufrir violaciones y abusos de sus derechos humanos por parte de otras personas detenidas o de guardias.
Además el Derecho Internacional no brinda protección explícita ante el abuso y la violencia contra las personas LGBT, así como tampoco respecto a su tratamiento médico (si lo requiriesen) mientras se encuentran en reclusión.
Algunos riesgos para estas personas son:
- arrestos arbitrarios
- acoso
- violencia física y psicológica
- confesiones forzadas
- violaciones
Este martes, Manuel Guerrero pudo comunicarse con su familia y notificó que algunos tratos discriminatorios continúan. Y es que las autoridades cataríes le han negado su medicamento antiretroviral para el VIH, pero por la presión mediática se lo han estado entregando a cuentagotas.
¿Manuel Guerrero será liberado?