Pese a que en muchos lugares del mundo, entre ellos México, se ha comenzado a legislar en contra de las llamadas "terapias de conversión" que buscan cambiar la orientación sexual o identidad de género de las personas LGBTI, la comunidad de obispos de Polonia han lanzado un mensaje promoviéndolas.
Tras tres día, la Conferencia Episcopal Polaca (KEP) llegó a su fin el pasado 31 de agosto y los obispos publicaron un documento de 27 páginas en el que describían su postura sobre diversos temas relacionados con la diversidad sexual.
El documento condena la violencia hacia esta población, pero al mismo tiempo promueve la idea de campamentos de terapia de conversión para la comunidad queer en Polonia, bajo el argumento de que la "ideología de género" ha creado "heridas espirituales" en las personas.
A pesar de que desde principios de la década de los 90 la Organización Mundial de la Salud quitó de su lista de enfermedades mentales la homosexualidad, la comunidad de obispos aluden a la "salud sexual" y la "orientación sexual natural" para justificar su propuesta sobre las "terapias de conversión".
“Ante los desafíos creados por la ideología de género y los movimientos LGBTI, y especialmente teniendo en cuenta las dificultades, sufrimientos y heridas espirituales que experimentan estas personas, es necesario crear clínicas (con la ayuda de la iglesia o dentro de sus estructuras) para ayudar a las personas a recuperar su salud sexual y su orientación sexual natural", dicta el documento citado por Pink News.
Los representantes religiosos polacos admitieron que los "centros de asesoramiento" están "claramente en contradicción" con cualquier evidencia científica, pero aun así los promueven afirmando que los "testimonios" demuestran que "una sexualidad diferente es un síntoma de heridas en varios niveles de la personalidad”.