Una pareja de pingüinos homosexuales del zoológico Cheng Yang, en China, robó el huevo de una hembra con la finalidad de formar una familia.
Un cuidador del recinto observó el momento en que los animales colocaron una piedra frente a la madre para distraerla y hacerse del huevo. No obstante, sus compañeros se dieron cuenta y, molestos, los expulsaron de la zona.
Para solucionar el problema, los encargados separaron a la pareja de los demás, pero intentarán ayudarla a "adoptar", dándoles un huevo de otra hembra que espera gemelos, pues para ellas es difícil cuidar de dos crías.
Con información de EFE.