Venom ha estado en el ojo del huracán desde su anuncio; el hecho de tener un universo de Spider-Man, sin Spider-Man, no lucía como algo prometedor; aún así, Sony tomó el riesgo y decidió seguir con su plan. Ahora que la obra está por estrenarse, se ha hablado de que es un rotundo fracaso, mal hecha y que no cumple con nada de lo prometido. Si bien es cierto que falla en varias cosas y que los puristas bien podrían odiarla, nosotros ya pudimos ver el filme y consideramos que no es el desastre que se comentó.
La película sigue la fórmula de las cintas de origen, presentándonos a Eddie Brock, un reportero dedicado cuyo temperamento y ego lo han llevado a ser amado y odiado por igual. Es precisamente esto lo que deriva en una crisis personal que lo afecta de gran manera, que a la postre lo llevará a relacionarse con una compañía que hace gala de malas prácticas y con el simbiote que cambiará su vida.
Si dividimos la película de manera aristotélica, podemos decir que donde falla Venom es en el planteamiento; establecer ¿Quién es Venom? ¿Quién es Eddie? ¿Por qué se unen? Etcétera; esto debido a que se nota a leguas que Sony batalló mucho para establecer todo el contexto sin el Hombre Araña, pues el Protector Letal depende en todas su génesis de Spidey. Aquí se tuvo que obviar todo lo que tuviera que ver con el trepamuros y su alterego Peter Parker; si bien hay ciertos guiños que podrían indicar alguna relación, en realidad no hay nada que ligue a este Venom con nuestro amigable vecino.
Esto, además de chocar con los fans, puede resultar cansado para el público en general, pues el desarrollo de todo esta primera parte es lento y hasta aburrido; tanto así que por momentos no parece ser una película que involucra a un ente extraterrestre que se "posesiona" de un perdedor de San Francisco.
No obstante, cuando entra en escena el antihéroe, todo se vuelve más fluido y divertido. La relación entre Venom y Brock está muy bien trabajada; de hecho, nos da una mejor idea de cómo es tener a dos seres vivos conscientes habitando el mismo cuerpo. Volviéndose, más que una película de ciencia ficción, algo parecido a las clásicas obras de compañeros, como Arma Mortal o Una Pareja Explosiva, donde tienes a dos personajes disímiles que tienen que convivir para llevar a cabo su misión.
Esto significa que se nos presenta un Venom más ameno, con un humor acido/negro, contrario a las versiones de cómics y tv, donde es más violento, obscuro y serio; esto bien podría ser por el hecho de la clasificación; recordemos que originalmente estaba pensada para Mayores de Edad y al final se decidió ir por Adolescentes y Adultos. Aún así, a menos que seas un purista del personaje, esta versión del mismo te parecerá hasta entrañable.
Mucho de eso es gracias también a Tom Hardy que hace un excelente Eddie Brock, superando con creces lo visto en la criticada versión de Spider-Man 3. Lamentablemente, sólo Hardy tiene una actuación memorable, el resto de los personajes; aunque no lo hacen mal, sólo cumplen con su cometido sin aportar más a la obra.
El CGI y la acción también está muy bien llevada, podemos ver a detalle todas las habilidades del antihéroe, desde su fuerza brutal, hasta la manera en que su cuerpo se vuelve adopta diferentes formas en el momento de la batalla. Destacando sobretodo la pelea final, entre simbiotes, donde la cámara hace diversas tomas para mostrarnos toda la viscosidad que puede traer un enfrentamiento de este tipo.
Por último, pero no menos importante, se cuenta con un par de escenas post-créditos; la primera es muy buena, que da entrada a una historia que todo el mundo quería ver desde que Spidey llegó al cine, pero que hasta este momento no se ha podido realizar; mientras que la segunda es meramente anecdótica y sólo le gustará a los seguidores más fervientes del universo araña.
Venom es una película de fórmula, y como tal cumple su cometido; no innova en ningún sentido y se limita a seguir las directrices de las obras de origen. No obstante, esto lo hace de manera adecuada, presentando una cinta entretenida y disfrutable (por lo menos en dos tercios de la misma), sin ninguna ambición de ofrecer algo más. Ten por seguro que su sólo buscas divertirte un rato, la pasarás bien con Eddie y su violento amigo; por el contrario, si te sabes toda la historia del simbiote que podrías hacer una tesis, es probable que no sea tanto de tu agrado, pues no tiene reparos en reinventar toda la mitología.