Scooby-Doo’ no es una de las caricaturas más complejas del mundo, de hecho es bastante predecible; aún así tuvo una muy buena base de fans, tal vez por esa razón Warner produjo ‘¡Scooby!’, reboot de la franquicia y el inicio de su nuevo universo en cine.

En general la obra es divertida y logra actualizar a la banda de la “Máquina del Misterio” sin perder la esencia de estos simpáticos personajes; además de que no teme hacer referencias a los clásicos animados, aunque de una manera que no resulta forzada o sobresaturada, como sucede en muchas películas actuales.

Aún así hay un par de puntos a señalar; la trama a veces romper con la idea de lo que es ‘Scooby-Doo’, además de que se notan algunos viejos recursos en la animación para ahorrar costos y cuadros al usar el CGI; pero como suele ser en estas reseñas, vayamos por partes.

Una historia de misterio y superhéroes

La historia de ‘¡Scooby!’ es como cualquier otra de origen; nos presenta la manera en que Scooby, Shaggy, Daphne, Velma y Fred se conocieron, para después hacer un corte a la época actual donde “Misterios S. A.” busca la manera de ser un negocio como tal, pues ya no son adolescentes y necesitan una manera de ganarse la vida.

Sin embargo, este plan se ve interrumpido por el repentino ataque de un grupo de robots y la huida de Scooby y Shaggy, empezando una aventura que involucrará también al héroe Fabulman y al villano favorito de Hanna-Barbera, Pierre Nodoyuna y su perro Patán.

¡Scooby!

A pesar de lo complejo que pueda sonar, la historia fluye bien y cada uno de los personajes tiene su momento y desarrollo, siempre dirigidos por los temas centrales de la obra, que son la amistad, el autoestima y si una persona ordinaria puede convertirse en alguien extraordinario.

No obstante, el meter a Fabulman y apelar los superhéroes parece algo forzado, pues las series y películas animadas de Scooby nunca dependieron de esto para ser exitosas. De hecho, el compañero de Dinamita, el perro maravilla, bien pudo tener su filme por separado.

Una bella animación aunque con unos trucos

Otra cosa a destacar es la animación; la cual es hermosa y recrea perfectamente los diseños clásicos de Hanna-Barbera, con colores vivos y respetando el estilo tradicional; pero dotando también a los personajes de un aire fresco. Todo con un gran nivel de detalle; aunque a costa de un viejo truco.

Prácticamente todos los escenarios que vemos en pantalla están vacíos, no ves elementos más allá que Scooby y compañía. Todo se desarrolla en desiertos, ferias abandonadas o naves sin tripulación, son pocos los momentos donde Warner lleva al límite el filme, mostrando grandes paisajes o multitudes.

¡Scooby!

Esto no afecta la trama de la película o hace que se vea mal, de hecho la historia es lo suficientemente divertida como para que estos detalles apenas si se noten; no obstante, alguien que muy quisquilloso o que disfruta de los despliegues espectaculares del CGI podrá encontrar este recurso como algo que “abarata” la producción.

‘¡Scooby!’ une a las nuevas y viejas generaciones

En un mundo donde parece que la brecha generacional se tiene que hacer evidente en cada acción, y que en lugar de tener un punto de encuentro se tiene que perpetuar aún más la separación; ‘¡Scooby!’ es una obra única que puede ser disfrutada sin restricción.

Abuelos, padres e hijos encontrarán algo interesante en un filme que no tiene más ambición que entretener. Un gran punto a su favor es que mantuvo los nombres del doblaje original en español; así Blue Falcon sigue siendo Fabulman, Dick Dastarly es Pierre Nodoyuna, entre otros.

Si bien la película ya está disponible en algunas regiones de manera digital, esta apenas va a llegar a México, el formato aún no ha sido anunciado; todo dependerá de la evolución de la pandemia en el país. Si tienen la oportunidad de verla les aseguramos que se divertirán, si es en cine, les pedimos que tomen las medidas preventivas.