Pese a críticas y escándalos, Gabriel Soto e Irina Baeva viven un intenso romance, a dos años de haber hecho pública su relación amorosa la pareja ha decidido dar un nuevo paso ¡se van a casar! Esta mañana la actriz presumió su anillo de compromiso.
“Dije que sí”, escribió Irina Baeva en Instagram donde publicó una foto en la que aparece besando la frente de Gabriel Soto. Por supuesto, sobre sale su mano izquierda donde luce orgullosa y satisfecha su anillo de compromiso. Sin dar grandes detalles, la propia informa que se comprometieron el 25 de octubre de 2020.
Las reacciones no se hicieron esperar: “Muchas felicidades y bendiciones”, “Ya era hora”, “Besos a los dos”, “Lo mejor para ustedes”, “Muy bonito y todo pero la fecha está sospechosa”, “La mejor noticia. Los quiero”, “Muchas felicidades y mucho rating”, “¿Se comprometieron en Nueva York o cómo?, son algunos de los comentarios.
Cabe recordar que en septiembre del año pasado, Irina viajó a Nueva York para perfeccionar su inglés así como para tomar un curso de actuación ya que uno de sus más grandes sueños es incursionar en Hollywood.
Curiosamente, hace unos días trascendió que Gabriel le fue infiel a Irina cuando está se encontraba en La Gran Manzana pues se sospecha que por esas fechas grabó su video sexual el cuál iba dirigido a una “amiguita”, información que el galán de telenovelas no ha desmentido y mucho menos confirmado.
La polémica historia de amor entre Gabriel Soto e Irina Baeva
Nadie olvida que Gabriel Soto e Irina Baeva iniciaron su historia de amor cuando el actor aún estaba casado con Geraldine Bazán, la madre de sus dos hijas. El coqueteo entre ambos inició durante las grabaciones de la telenovela “Vino el amor” trasmitida entre el 2016 y 2017. Pese a que e varias ocasiones los captaron juntos negaron tener una relación extramarital.
Fue Geraldine quien exhibió a la pareja mostrando pruebas que la propia Irina le hacía llegar. A Soto no le quedó mas remedio que presentar a la actriz como su novia y aceptar que varias veces engañó a su esposa y que en esta ocasión fue porque el amor entre ambos se había desgastado.