Han pasado seis meses desde que Irina Shayk y Bradley Cooper terminaron su relación que inició en 2015. Fue a mediados del 2019 cuando la pareja se separó después de varios rumores de crisis que fueron aumentando con la amistad entre el actor y Lady Gaga.

La modelo rusa de 34 años no acostumbra a hablar de su vida privada, pero por primera vez rompió el silencio para explicar lo que significó su ruptura. En entrevista para Vogue, Irina Shayk dio varios detalles de su relación y separación con Bradley Cooper.

“Hemos tenido mucha suerte de haber tenido lo que tuvimos juntos. La vida sin Bradley es un terreno totalmente desconocido para mí. Creo que en las buenas relaciones tú ofreces lo mejor y lo peor de ti. Por eso dos grandes personas no tienen por qué ser una gran pareja”, comentó Shayk.

Ha resultado complicado ser madre soltera

La pareja anunció su separación en junio de 2019, y un par de meses después se juntaron por unos minutos en el aeropuerto de Ibiza. La modelo entregó a su hija Lea a Cooper para viajar de regreso a Los Ángeles luego que pasaran unas vacaciones en el archipiélago de España.

Irina también habló de las dificultades a las que se ha enfrentado como madre soltera, pues le ha resultado complicado dedicar tiempo a Lea y al trabajo. La modelo rusa ha preferido mantener su vida alejada de los reflectores para no exponer a su familia.

“Es complicado encontrar el equilibrio entre ser madre soltera y ser una mujer trabajadora que se gana la vida. De verdad hay días en los que me levanto y pienso: ‘Dios mío, no sé qué hacer, me estoy desmoronando”, confesó.