Fans y no fans de Justin Bieber saben que el joven cantante ama los automóviles, es más, tiene una colección que incluye un Lamborghini Aventador, un Audi R8 y un Maybach S600, y un Mercedes Benz G Wagon, entre otros costosos vehículos de lujo, por lo que no nos sorprende que haya adquirido uno más.
Se trata de un Rolls- Royce Wraith 2018 que Justin Bieber mandó a personalizar. El auto es tan galáctico y futurista que todos quieren pasear en él por su exótico diseño. Robocot estará tan celoso de él. Acá sus fotos:
Los genios detrás del diseño son los chicos de West Coast Customs, quienes fueron los primeros en presumir su antes y después en su cuenta de Instagram donde orgullosos muestran la transformación en video. “Cuando no exista, diséñelo”, invitan.
Las reacciones no se hicieron esperar, éstas se dividieron, algunos amaron la vanguardia y el descaro a lo que llamaron una visión futurista mientras que otros les reprocharon haberlo arruinado.
“Prefiero tenerlo en existencia que arruinarlo así”, “¿Por qué, por qué?”, “Todos los comentarios negativos son de propietarios de Honda”, “El dinero no compra el gusto”, “Paseo épico, definitivamente llamará tu atención en la carretera”, “Ustedes hacen lo imposible”, “Estoy un poco confundido ¿De verdad giran las ruedas?”, “Me preguntó cómo pasará los topes”, “Maldita sea, ¿qué le hicieron?”, se lee entre comentarios.
¿Cuánto pagó Justin Bieber por el exótico automóvil?
El Rolls Royce de Justin Bieber cuesta 330 mil dólares, es decir más de seis millones y medio de pesos.
Su elevado precio explica porqué este carro parece salido de la NASA. Cabe mencionar que apenas 4 años atrás, Roll-Royce presentó el 103EX, un carro elegante que medía casi 6 metros de largo. Su concepto destacaba por su techo corredizo panorámico así como por sus enormes pero ocultos neumáticos y su alta parrilla, así como un pequeño elevador que ayudaba al conductor a tocar el suelo.
Curiosamente, Justin Bieber pidió su auto sin techo corredizo. Aún se desconoce si los chicos de West Coast Customs se metieron con el interior. Queremos pensar que sí.