Rosie Rivera señaló en Instagram lo todo lo bueno y lo malo que le han traído las cirugías plásticas. Lo malo: las cicatrices. Lo bueno: no carnes colgando, no panza y ahora hasta pompas levantadas.
En su más reciente publicación la hermana de Jenni Rivera luce un vestido entallado y dice que se ve así gracias a que se levantó los glúteos con el “Brazilian butt lift”, un procedimiento que consiste en inyectar su propia grasa en las pompas, y a la liposucción.
Pero, dice que eso solo ayuda, que porque debe comer sano y hace ejercicio.
Y para terminar, agregó un sutil mensaje para sus detractores: “sus opiniones no cambiarán mi vista… es con el dinero que me he ganado a pulso”.