Este 27 de junio se estrenó Un lugar en silencio: día uno, la precuela que nos revelará cómo ocurrieron los eventos de las dos entregas de Un Lugar en Silencio del 2018 y 2020.

Y es que sorprendentemente, la precuela Un lugar en silencio: día uno, dirigida por Michael Sarnoski, logra superar con creces a las dos anteriores.

Pues no solo la magia actoral de Lupita Nyong’o -41 años de edad- y la química que tiene con Joseph Quinn -30 años de edad-, sino también el elemento del tercer protagonista: un gato.

Un lugar en silencio: día uno demuestra que las precuelas tienen mucho potencial

Un lugar en silencio: día uno es la precuela de las dos entregas anteriores de Un lugar en silencio, y aunque pareciera que se repetirá la historia, la verdad es que no es así.

Si bien al ser del mismo universo y género usan los mismos recursos, la historia narra cómo comenzaron a aparecer los alienígenas con los que debes estar en silencio absoluto.

En Un lugar en silencio: día uno nos presentan la historia de Sam (Lupita Nyong’o), una poeta con cáncer terminal que vive en un asilo para enfermos desahuciados.

Enojada con la vida, con los pronósticos y demás, Sam tiene como única compañía a su gato Frodo, quien logra tranquilizarla en sus momentos de ansiedad y dolor.

Cuando los integrantes del asilo salen por un poco de entretenimiento a la ciudad de Nueva York, su contacto con las personas se verá frustrada por el inicio de una invasión alienígena.

A partir de entonces, el viaje de Sam y el gato Frodo comenzará, pero no con intenciones de salvarse como todos esperarían.

A su viaje se le une Eric (Joseph Quinn), quien fue encontrado por el gato Frodo y quien decide acompañar a Sam pese a la emergencia que se vive en la ciudad.

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¿Por qué Un lugar en silencio: día uno es mejor que sus predecesoras?

Si bien la historia pareciera ser algo simple, hay algo que es innegable y es la empatía que Lupita Nyong transmite, así como la comprensión del personaje de Joseph Quinn y sin dudarlo el gato.

Pues el espectador se sumerge por completo en la historia de Un lugar en silencio: día uno, sintiendo incluso la misma ansiedad que los actores y una necesidad urgente por saber del bienestar del gato.

Aunque el instinto de la mayoría sería huir y salvarse de la invasión alienígena de Un lugar en silencio: día uno, Sam tiene otros planes debido a la enfermedad que padece y con lo cual logras simpatizar al momento.

Hay momentos en donde incluso los espectadores tendrán miedo de producir cualquier ruido al sumergirse por completo en el ambiente de Un lugar en silencio: día uno.

Pues incluso Un lugar en silencio: día uno podría ser la película de todas las interiores que ha estado mejor dirigida, con unos grandes visuales pero sin duda, la clave aquí es el sonido.

Pero sin duda, el gato Frodo es quién se robará toda la atención de Un lugar en silencio: día uno, siendo él el protagonista inesperado de la historia y con quien el público se encariñará desde el primer instante.

Pues cada escena con el gato Frodo hará que tengas la expectativa sobre si sobrevive o no, poniéndote ansioso ante la presencia de las criaturas de Un lugar en silencio: día uno.

En resumen: Un lugar en silencio: día uno es una entrega que no solo está a la altura de sus predecesoras, sino que incluso es posible que las haya superado.

Aunado a la adición de un protagonista inesperado: un gato que logrará empatizar y transmitir todas las emociones y sensaciones posibles al público que decida ver Un lugar en silencio: día uno.

Un lugar en silencio: Día 1