Andrea Legarreta -de 52 años de edad- casi fue víctima de unos estafadores que intentaron hackear su WhatsApp. Lo peor es que no es la primera famosa a la que le pasa.
Por fortuna para Andrea Legarreta, la estafa no pasó a mayores, pues aseguró que la verificación en dos pasos de WhatsApp fue lo que la salvó.
Motivo por el cual difundió la información con sus seguidores, pues busca prevenir que más personas puedan ser víctimas de la misma estafa.
Andrea Legarreta cuenta el modus operandi de los estafadores que casi le hackean su WhatsApp
Andrea Legarreta pudo ser víctima de una estafa que consistía en hackear su cuenta de WhatsApp. Y por lo que narra la presentadora, todo inició con una llamada telefónica.
Al otro lado del teléfono un hombre dijo ser de paquetería que se comunicaba para entregar un pedido.
Al principio, Andrea Legarreta no sospechó, pues daba la casualidad de que sí había pedido un paquete con anterioridad.
Posteriormente, los estafadores le pidieron revisar su correo para que les proporcionara un código que supuestamente le habían enviado.
Sin embargo, la situación se tornó sospechosa cuando Andrea Legarreta les dijo que no había recibido el correo por lo que le dijeron que se lo enviarían por WhatsApp.
Momento en el que la presentadora les dictó el código, pero colgó de inmediato una vez se lo volvieron a pedir.
Fue entonces cuando notó que su WhatsApp se estaba reiniciando, siendo gracias a la verificación en dos pasos que los estafadores no lograron su cometido.
Más personas pudieron ser estafadas del mismo modo que Andrea Legarreta
Por fortuna para Andrea Legarreta, su WhatsApp terminó a salvo de los estafadores.
Aún así el compartir su experiencia le permitió descubrir que, recientemente, más personas cercanas a ella casi fueron víctimas de la misma estafa.
Entre ellas se encuentra Linet Puente -de 41 años de edad- quien compartió una historia diciendo que le pasó lo mismo que a Andrea Legarreta.
La presentadora de Hoy lo compartió para seguir difundiendo, pero también para dar a conocer que a su hermano, su jefa y su compañera Martha Figueroa, les pasó lo mismo.