A un día de la muerte de Diego Verdaguer, con profunda tristeza hoy recordamos cómo conoció a Amanda Miguel. En los años setenta inició el amor más sólido del mundo de la música.
En un capítulo más de “El minuto que cambió mi destino”, programa televisivo de Gustavo Adolfo Infante, Diego Verdaguer, quien murió por complicaciones de Covid-19, platicó haber conocido a la mujer de su vida en la calle.
Resulta que él iba manejando por calles de Argentina, por lo que al detenerse en uno de los semáforos, Amanda Miguel cruzó frente a su vehículo, llegó para quedarse en su vida.
“Yo estoy muy agradecido con ese minuto que cambió mi destino”, dijo y recordó que Amanda Miguel no iba sola sino que estaba acompañada de sus dos hermanas, por lo que las tres cruzaron frente a su vehículo.
Debido a que ya era un cantante famoso, las chicas lo reconocieron y él las saludó, pero en cuanto cambió el semáforo a verde, pisó el acelerador y continuó su camino.
Diego Verdaguer buscó a Amanda Miguel sin saber por qué
No obstante, algo lo hizo cambiar de opinión y decidió seguir a esas tres mujeres, regresó unas cuadras pero ya no las encontró. Diego Verdaguer buscó a Amanda Miguel sin saber por qué.
Creyó que no volvería a verlas y resignado condujo despacio hasta que su mirada se desvió hacia un hotel y ahí estaban pues resultó que el papá de éstas les alquiló una habitación para vivir por un tiempo.
“El papá estaba por comprarles un departamento en Buenos Aires. Estaban viviendo en un hotel”, recuerda y asegura que una vez que las encontró, bajó del carro y las invitó a tomar un café.
Hermana de Amanda Verdaguer fungió como cupido en su romance con Diego Verdaguer
Como todo un caballero, Diego Verdaguer llevó a las tres damas en su coche por lo que Amanda Miguel se sentó al lado de él y le aseguró que también era cantante.
“Cuando la escuché cantar dije ‘Dios santo’… y de ahí empezó toda la historia”, recordó Diego Verdaguer y aseguró que la hermana de ésta fungió como cupido en la relación.
Una vez que inició su romance, él la ayudó a despegar en la industria musical y aunque siempre fueron un equipo, Diego Verdaguer sintió un poco de celos de parte de su mujer.
Sin embargo, esto no arruinó su relación ya que la falta de egoísmo fue la pieza clave de su éxito como pareja.
Por supuesto, el matrimonio tuvo altas y bajas especialmente por celos e infidelidades, pero se mantuvo unido sobre todo por su hija en común Ana Victoria.