Hace algunos años, Jorge Ortiz de Pinedo -de 76 años de edad- quiso hacerle un chiste a Paco Stanley pero terminó humillado en su propio programa.

Y es que tras cumplirse los 25 años del asesinato de Paco Stanley, continúan recordándose algunas de las anécdotas y mejores momentos del presentador.

Siendo así que algunos fans y medios volvieron a sacar a la luz el día en el que Jorge Ortiz de Pinedo fue humillado por el mismo Paco Stanley.

Un momento que tuvo lugar en el programa Al ritmo de la noche, mismo que era conducido por Jorge Ortiz de Pinedo.

Jorge Ortiz de Pinedo y Paco Stanley

Jorge Ortiz de Pinedo le suelta un chiste a Paco Stanley durante su programa

Fue durante una de las emisiones de Al ritmo de la noche que Jorge Ortiz de Pinedo le dio la bienvenida a Paco Stanley.

Para ese entonces, el presentador ya era uno de los favoritos de la televisión, pues solía conectar rápidamente con el público.

Algo que pasó en el programa de Jorge Ortiz de Pinedo, quien le quizo lanzar una broma a su invitado Paco Stanley:

“Oye, gallinazo, macarenazo, pin pin pon pon, tiritititi. ¿De dónde sacas tantas tarugadas?“.

Jorge Ortiz de Pinedo

Tras soltar la pregunta, el público se empezó a reír junto con el presentador. Todo mientras Paco Stanley se quedaba callado y con expresión tranquila.

Pero lo que nadie se esperaba, es que en ese corto instante estaba pensando la respuesta perfecta para regresar la broma a Jorge Ortiz de Pinedo.

Jorge Ortiz de Pinedo y Paco Stanley

La respuesta de Paco Stanley que dejó humillado a Jorge Ortiz de Pinedo

Inmediatamente después de que el público dejara de aplaudir y reír, fue que Paco Stanley soltó su respuesta a Jorge Ortiz de Pinedo.

Algo que le permitió regresar la broma a su anfitrión, quien a escucharla no pudo evitar reír, al igual que el resto del público.

“Luego te digo para que tengas éxito”.

Paco Stanley

Y es que una de las cosas por las que Paco Stanley era popular entre los presentadores, era por su respuesta rápida y fácil improvisación.

Un aspecto que no lo abandonó el día que Jorge Ortiz de Pinedo le quiso ver la cara de tarugo.