La pequeña Renata Fuentes, hija de Jacqueline Bracamontes, sufrió un accidente y terminó en el hospital. Así lo reveló Martín Fuentes, esposo de la actriz.
En redes sociales, el piloto de profesión dio detalles sobre el accidente que sufrió la pequeña de 5 años en su casa y publicó fotos que Jacqueline Bracamontes retomó.
Aunque no lo parecían, las heridas que sufrió la hija de Jacqueline Bracamontes fueron tan graves que terminó requiriendo atención en un hospital.
Hija de Jacqueline Bracamontes sufrió una fractura
En sus historias de Instagram, el esposo de Jacqueline Bracamontes contó que su hija Renata se aplastó el dedo meñique de la mano derecha con una puerta de su casa.
La situación que parecería de poca importancia, terminó haciendo que Martín Fuentes y la tercera de sus hijas corrieran al hospital.
¿Por qué? El esposo de Jacqueline Bracamontes señaló que su hija resultó con un corte profundo y una fractura en el dedo, lesiones que mostró en algunas fotos:
Martín fuentes también mostró las curaciones a las que Renata fue sometida, destacando lo valiente que se portó su hija, pues parece no haber llorado mientras era atendida.
Hija de Jacqueline Bracamontes requirió puntadas
Jacqueline Bracamontes retomó las publicaciones de su esposo en sus historias de Instagram, donde dio más detalles sobre las lesiones de Renata.
La actriz reveló que los médicos tuvieron que darle algunas puntadas al dedo de su hija e inmovilizar su mano porque el golpe fue tan fuerte que le provocó ruptura de tendón:
“Se fracturó el dedo y se le rompió el tendón... El resultado: seis puntadas y le tuvieron que volver a pegar la uña”
Jacqueline Bracamontes, actriz
¿Cómo sigue Renata, hija de Jacqueline Bracamontes, tras su fractura de dedo?
Un día después, Martín Fuentes publicó un video en el que dio una actualización sobre el estado de salud de Renata.
El esposo de Jacqueline Bracamontes aparece diciéndole a su hija que le han preguntado insistentemente por ella y le pregunta: “¿cómo estás?”.
La niña, quien aparece jugado con unos dibujos y platicando con sus hermanas, responde “bien, bieeeeen”, para después enseñar la lengua y seguir jugando.
Finalmente, Martín Fuentes le pregunta a su hija si ya quiere ir a sus clases de gimnasia, ella le responde que sí, pero él le recuerda que por su lesión lo tiene prohibido.