La salud de Yolanda Andrade no mejora. Aunque la conductora se ha puesto en manos de grandes médicos, aún no detectan el origen de sus malestares.
Por lo que Julio César Chávez -de 62 años de edad- cree que la están embrujando.
Esto porque en noviembre pasado, Yolanda Andrade -de 52 años de edad- nuevamente anunció que se retirará temporalmente de la televisión debido a que le cuesta articular palabras.
Por lo que se fue a Estados Unidos en busca del médico que le ayude a contrarrestar sus malestares, los cuales no serían “normales”.
Julio César Chávez cree que la enfermedad de Yolanda Andrade habría sido por brujería
Frente a micrófonos del programa Venga la Alegría, Julio César Chávez confirmó que en los últimos meses ha estado en contacto con Yolanda Andrade.
Por lo que Julio César Chávez está enterado de la difícil situación por la que atraviesa su amiga y conductora.
El veterano boxeador explicó que Yolanda Andrade viajó a Estados Unidos para realizarse unos análisis que podrían descubrir el por qué de sus malestares.
Pues, hasta el momento, ningún médico ha podido descifrar la razón.
“Mira, es un chequeo nada más de rutina de parte de ella. Porque realmente no le hallan qué es lo que tiene”, dijo antes de insinuar que podría tratarse de brujería.
“Está muy raro eso, que es brujería, que no es brujería, que es una bacteria, o sea, pero está bien, gracias a Dios”
Julio César Chávez
Mientras se confirma o no, Julio César Chávez dice estar apoyando a su amiga, quien está en tratamiento siguiendo al pie de la letra indicaciones médicas.
Julio César Chávez recuerda haber sido embrujado
Julio César Chávez está convencido de que la brujería existe y que Yolanda Andrade podría ser una víctima más.
Julio César Chávez dice haber sido embrujado en el pasado, cuando la pasó muy mal durante una época.
“Me estaban haciendo brujería”, dice y enseguida explica que por un tiempo usó una banda roja que le ayudaba a combatir la mala energía.
Incluso, alguien le probó que la persona que lo tenía embrujado metió su fotografía en una bandeja con hielo, así como encontró cosas y ‘monitos’ en su casa.