En un encuentro con la prensa, Nicolás Buenfil reveló que se muere de los nervios por conocer a su abuelo, Ernesto Zedillo, de 72 años de edad.

Pero aunque algunos usuarios bromearon cuestionando si Nicolás Buenfil “¿le debe algo?”, el motivo sería la carrera política en México de Ernesto Zedillo.

Y es que Nicolás Buenfil -de 19 años de edad- no tendría más de dos años de haber conocido a su papá o haber comenzado a convivir con su familia paterna.

Nicolás Buenfil está nervioso por conocer a su abuelo Ernesto Zedillo

Durante un encuentro con la prensa, Nicolás Buenfil fue cuestionado sobre la familia de su padre, Ernesto Zedillo Jr., con quien convivió por primera vez en su vida este 2024.

Y aunque Nicolás Buenfil tendría una buena relación con la familia de su padre, reveló que se muere de los nervios por conocer a su abuelo, Ernesto Zedillo.

Nicolás Buenfil

Pues a diferencia del empresario con quien su mamá, Erika Buenfil -de 60 años de edad- sostuvo una relación a principios del 2000, Ernesto Zedillo fue el presidente de México.

Además, señaló Nicolás Buenfil, durante lo que será su primer encuentro, él deberá explicarle su parentesco.

“No sé, yo creo que sí impone muchísimo, aparte decirle lo que soy de él, no sé, va a ser una experiencia buena”, dijo el joven.

Este primer encuentro con el expresidente de México no tendría aún una fecha determinada; sin embargo, Nicolás Buenfil dijo que podría llegar pronto.

“Quién sabe cuando pase eso, probablemente pronto, no sé, pero sí me da muchos nervios, la verdad”

Nicolás Buenfil

¿Cuándo conoció Nicolás Buenfil a su papá?

Durante una entrevista con Isabel Lascurain, Erika Buenfil reveló que el primer encuentro entre Nicolás Buenfil y su padre tuvo lugar en febrero del 2022.

Habría sido Ernesto Zedillo Jr. quien contactó a Nicolás Buenfil para conocerlo antes de que cumpliera 18 años de edad; sin embargo, no dio más detalles.

Y es que la actriz señaló que el encuentro entre Nicolás Buenfil y su padre sería un tema muy personal del cual solo su hijo puede hablar.

Nicolás Buenfil