Lorena Herrera -de 57 años de edad- reveló quienes serán sus herederos cuando muera, por lo que sus vestidos de lentejuela estarán en buenas manos.
Cabe destacar que la actriz y diva mexicana se mantuvo firme a lado de su pareja Roberto Assad -de 48 años de edad- en la decisión de no tener hijos.
Por lo que Lorena Herrera optó por poner a otras personas dentro de su testamento, mismos quienes han acompañado a la actriz en momentos importantes.
Señalando más que nada quiénes serán los únicos beneficiarios de las ganancias que genere su canal de YouTube.
Así como a los futuros dueños de los vestidos con transparencias y lentejuelas que la han caracterizado durante toda su carrera.
Lorena Herrera cambia su testamento e incluye a uno de sus amigos como heredero
Fue durante uno de los capítulos de Siempre Reinas 2 que Lorena Herrera se dio cita para hacer modificaciones en algunos aspectos de su testamento.
Años atrás la actriz ya había realizado uno, solo que ahora lo cambió para incluir a otras personas que considera importantes.
En este sentido agregó a un amigo de nombre Iván, quien al parecer es quien ayuda a Lorena Herrera con el contenido para su canal de YouTube.
Por lo que la actriz quiere que él se quede con sus ganancias del canal de YouTube, ya que lo considera como un miembro de su familia.
“Él es quien me ha ayudado a grabar mi contenido de YouTube y para que se lo quede alguien más, prefiero que sea él”
Lorena Herrera
¿Qué le pasará a los vestidos de Lorena Herrera? La actriz ya sabe a quiénes los va a heredar
Sus ganancias no son lo único que Lorena Herrera quiere poner a disposición de personas importantes, pues ya sabe a quiénes irán sus característicos vestidos.
Estos últimos conforman toda una colección que incluye los trajes que la actriz ha utilizado y guardado a lo largo de su carrera.
De acuerdo con lo que comentó Lorena Herrera, sus vestidos con lentejuela pasarán a manos de su club de fans, siendo ellos quienes tomen la decisión de cómo disponer de ellos.
Pues al parecer, Lorena Herrera tiene la esperanza de que sus famosos vestidos sean donados o subastados para una recaudación de fondos.