Bad Bunny -de 30 años de edad- se rompió en pleno concierto en Nueva York y no pudo evitar llorar, asegurando que tiene “días tristes”.
El segundo concierto de Bad Bunny en su gira Most Wanted en Nueva York hará historia para el Conejo Malo.
Y no precisamente por la clase de show que ofreció a sus fans, sino porque Bad Bunny llevaba los sentimientos a flor de piel.
Bad Bunny llora en pleno concierto en Nueva York
Bad Bunny ofreció su segundo concierto en Nueva York, donde cantó casi completo su último disco Nadie sabe lo que va a pasar mañana.
Con un estilo cowboy -tal como lo exige el disco- Bad Bunny confesó sentirse triste porque no todos sus días han sido buenos últimamente.
Bad Bunny se mostró serio y conmovido durante todo su concierto, un semblante muy diferente al que tenía acostumbrados a sus fans.
Vestido con un conjunto color rojo y bolso de piel a juego, Bad Bunny comenzó cantando “Nadie sabe” y después se detuvo en silencio a mirar al público.
La respiración pesada y el afán de tomar agua revelaron que Bad Bunny no estaba del todo bien arriba del escenario.
Además, los bailes de perreo y twerking cambiaron por bailarines vestidos con capas largas y máscaras de calaveras.
Aunque miles de personas coreaban el nombre de Bad Bunny, nada de esto parecía animar a Benito.
Finalmente, dedicó agradecimiento “a los que están desde el día uno” y explicó el motivo de su tristeza y llanto:
“Soy un ser humano cualquiera, tengo días tristes y días que no sé cómo me siento.”
Bad Bunny
Fue la canción Un X100to la que llevó hasta las lágrimas a Bad Bunny, quien interpretó el tema sobre un piano y sin acompañamiento.
“No quiero estar triste en Nueva York”, dijo Bad Bunny antes de entrar a la parte más feliz de su concierto.
¿Qué ha pasado con Bad Bunny? Se mantiene ausente en redes sociales
Las redes sociales de Bad Bunny son prueba de que el cantante no está del todo bien.
Aunque es una figura internacional y tiene más de 46 millones de seguidores, Bad Bunny sólo acumula 5 publicaciones.
De estas, la más reciente tiene fecha del 10 de marzo, y muestra a Bad Bunny sosteniendo una cerveza y celebrando su cumpleaños.