Yuri, de 59 años de edad, confesó que tuvo una adicción al sexo y habló de cómo se ‘curó’.

“Casi me vuelvo ninfómana”, reveló Yuri durante la reveladora entrevista que otorgó al músico, empresario y ahora youtuber Nayo Escobar.

Durante la charla, Yuri habló de las consecuencias que tuvo en su vida que el éxito le llegara durante la adolescencia.

Así, Yuri confesó que como muchos otros artistas, cayó en los excesos, aunque en su caso esto no tuvo que ver con el consumo de sustancias, sino con algo muy cercano al amor.

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Yuri: “Yo me acosté con mucha gente”

Yuri recordó que la fama le llegó a los 16 años de edad, lo que resultó muy abrumador para ella y terminó cayendo en los excesos, como muchos otros cantantes.

Sin embargo, Yuri puntualizó que su adicción no fue a los estupefacientes, como le sucedió a otros de sus colegas.

Yuri señaló que ella desarrollo una adicción al sexo, pues se sentía muy sola y estaba muy necesitada de cariño.

Esto llevó a Yuri a tener múltiples parejas sexuales, entre las que incluso hubo hombres casados.

Y es que, Yuri dijo que bastaba con que un hombre le gustara, para añadirlo a su lista de conquistas. Así, confesó: “Yo me acosté con mucha gente”, dijo.

Lo malo del asunto, destacó Yuri, fue que su adicción al sexo la hizo incurrir en prácticas riesgosas, como tener coito sin usar métodos anticonceptivos.

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Yuri revela que su adicción al sexo la puso en riesgo de padecer cáncer

Yuri destacó que a pesar de esto nunca quedó embarazada, pero sí enfrentó una situación que puso en riesgo su vida, pues desarrolló papiloma cervico uterino como consecuencia.

“Casi [fue] cáncer, casi me mata”, reconoció Yuri, quien dijo que se quedó a nada de convertirse en ninfomaniaca, pero no llegó a suceder porque Dios llegó a su vida, afirmó.

¿Cuándo sucedió esto? Yuri recordó que primero tuvo que tocar fondo, lo cual sucedió al terminar de grabar la telenovela ‘Volver a Empezar’, de 1995.

En ese entonces su vida era grabar la telenovela y dar conciertos, lo que no le daba ni un día de descanso. El resultado: comenzó a perder la voz, a sufrir depresión y a tener ideas suicidas.

Cuando se disponía a saltar de un balcón, recordó Yuri, logró escuchar la voz de Dios que le pidió no arrojarse al vacío y ella le pidió ayuda a cambio de su carrera.

Esto llevó a Yuri a convertirse en una cantante cristiana, aunque luego de un tiempo retomó su carrera como intérprete de baladas y pop.