La Fiscalía de Chihuahua dijo que dos personas siguen desaparecidas en Cerocahui, luego de los asesinatos de los sacerdotes jesuitas.
Así lo informó, Roberto Javier Fierro Duarte, fiscal del estado, quien en conferencia de prensa, dijo que José “N”, alias “el Chueco”, privó de la libertad a dos personas, los cuales no eran turistas, sino residentes de Cerocahui.
De acuerdo con el fiscal, las personas fueron desaparecidas luego de que se llevó a cabo un juego de beisbol con un equipo patrocinado por “el Chueco”, el cual fue derrotado por otro equipo donde jugaban Paul “N” y Armando “B”, quienes fueron agredidos y privados de la libertad.
Cabe destacar que, luego de la incursión del Cártel de Juárez y el Cártel de Sinaloa, Chihuahua se volvió uno de los 5 estados más violentos, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
“El Chueco” disparó en contra de una de las dos personas desaparecidas en venganza
De acuerdo con versiones, “el Chueco” detonó un arma de fuego contra Paulo “B” y secuestró a Armando “B” como venganza luego de perder el partido de equipo de béisbol.
Esto porque luego de perder el encuentro, Jose “N” inició una disputa con ambos sujetos, los cuales son hermanos.
El fiscal de Chihuahua informó, además, que “el Chueco” también prendió a la vivienda en la cual ambas personas habitaban como acto de represión.
Asimismo, precisó que una mujer y un niño, quienes también residen en Cerocahui y tienen un vínculo con las víctimas, también fueron reportados como desaparecidos.
Sin embargo, luego de iniciar las investigaciones correspondientes, se logró conocer que ellos se encuentran en otro lugar, sanos y salvos, gracias a que se estableció una comunicación con familiares.
Debido a lo anterior, se determinó que fueron, únicamente, dos personas en Cerocahui, quienes desaparecieron.
Pedro “P”, guía de turistas, fue quien llegó con sacerdotes jesuitas a Cerocahui
Por otro lado, se informa que Pedro “P”, guía de turista en Cerocahui, interactúo con “el Chueco” y fue privado de la libertad.
Testimonios recogidos por la fiscalía, indican que éste, a pesar de estar policontundido, logró escapar de su cautiverio y llegar al templo de la comunidad de Chihuahua, donde fue auxiliado por los dos sacerdotes jesuitas.
Allí, llegaría “el Chueco” y dispararía contra las personas previamente mencionadas.
Como era de esperarse, entrevistas señalaron como autor a “el Chueco”, por ello autoridades de Chihuahua acordaron lanzar una recompensa de hasta 5 millones de pesos a quien aporte información veraz, eficaz y útil que conduzcan a la captura del capo.
El fiscal concluyó expresando que gracias a los operativos, así como barridos, fueron encontrados los cuerpos sin vida en la zona y se aplicaron los protocolos de identificación, así como de auxilio a víctimas.