Hoy 7 de enero, la Policía Ministerial de Aguascalientes esclareció el caso del “niño del contenedor”, hecho por el que fueron detenidos los padres del menor de edad; esto 25 años después de su asesinato.
La detención de Liliana Lucero y Francisco Javier se dio gracias a un operativo del Grupo de Homicidios de la Policía Ministerial de Aguascalientes, el cual fue llevado a cabo en conjunto con las autoridades de Quintana Roo en la ciudad de Chetumal.
El caso del “niño del contendor” se remonta a noviembre de 1999, fecha en la que los padres de Dhilan Randall abandonaron el cuerpo del menor de 4 años de edad muerto en un contenedor de basura en la ciudad de Aguascalientes, situación de la que se percató un pepenador que dio aviso a las autoridades.
Caso del “niño del contenedor” en Aguascalientes: Padres del menor enfrentan cargos por homicidio
En torno al caso del “niño del contenedor” en Aguascalientes, las autoridades ministeriales informaron sobre la detención de Francisco Javier “N”, alias “El Profe” y/o “Profesor”, y Liliana Lucero “N”, una pareja buscada por el homicidio de un niño llevado a cabo 25 años atrás.
Hoy 7 de enero, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo explicó que, después de huir a León, Guanajuato; Oaxaca y Palenque, Chiapas, la pareja se estableció en la capital de Quintana Roo en 2002, donde permaneció oculta hasta su reciente captura.
En ese sentido, se precisó que Francisco Javier “N” y Liliana Lucero “N” fueron entregados a las autoridades del estado de Aguascalientes, quienes determinarán su situación legal.
Caso del “niño del contenedor” en Aguascalientes
El caso de Dhilan Randall, referido en la prensa como el “niño del contenedor”, se remonta al 12 de noviembre de 1999, cuando los padres del menor tuvieron una discusión en Teocaltiche, Jalisco, tras la cual el hombre golpeó al menor hasta matarlo.
Posteriormente, el cuerpo de Dhilan Randall, de 4 años de edad, fue envuelto en cobijas y metido en una caja de cartón que fue atada con un lazo, según el relato de la Fiscalía de Quintana Roo, para ser trasladado en un autobús a la ciudad de Aguascalientes.
Una vez en dicho punto, el padre del menor abandonó el cuerpo en un contenedor de basura para después regresar a su domicilio, del cual huyó con Liliana “N” hacia León, Guanajuato en primera instancia. El cuerpo del menor fue encontrado por un pepenador.