Luego de 5 días del colapso e inundación en la mina Micaram en Múzquiz, Coahuila, se localizaron los cuerpos de los últimos 3 mineros que quedaron atrapados tras el accidente.

La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) informó que el cuerpo de uno de estos mineros fue recuperado a las 9:57 de la mañana en la mina ubicada en la comunidad de Rancherías.

La STPS informó del rescate del quinto minero

Asimismo, dijo que los trabajos de rescate continúan en coordinación con las autoridades federales y locales así como los rescatistas para la recuperación de los dos mineros restantes.

Por su parte, se informó que los cuerpos de los 3 mineros fueron encontrados bajo toneladas de lodo, por lo que no se espera encontrar a ninguno con vida.

Mineros de Múzquiz murieron asfixiados

El Fiscal General de Coahuila, Gerardo Márquez Guevara, informó que, de acuerdo con las necropsias de ley practicadas a 4 de los cuerpos rescatados de la mina de Múzquiz, los mineros murieron por asfixia por sumersión.

Asimismo, destacó que los cuerpos ya fueron entregados a sus familiares para su sepultura.

Por otra parte, el fiscal general dijo que ya se iniciaron las investigaciones por homicidio culposo, que serán llevadas por el Ministerio Público de Coahuila.

Gerardo Márquez recordó que es necesario que se termine con las maniobras de rescate de los cuerpos de los 2 mineros que faltan para poder iniciar con las investigaciones.

El fiscal general informó que, cuando se acabe con las labores de rescate, se iniciará con el trabajo de campo para iniciar con las investigaciones que vislumbren lo ocurrido al interior de la mina.

Despiden a mineros con pelea de gallos

Familiares, amigos y vecinos de los mineros los despidieron con una pelea de gallos en un palenque improvisado con cartones.

El festejo fue en honor de Humberto y Pedro, mineros que murieron en el colapso de la mina de Múzquiz.

Los gallos fueron presentados a través del cristal del ataúd a los mineros y luego fueron echados a pelear para así despedir a sus amigos y familiares.

Humberto trabajó por mucho tiempo en la mina para mantener a sus hijos de 4, 11 y 13 años; por su parte, Pedro entró a trabajar a la mina dos días antes del accidente por invitación de su primo.