En Jalisco, el cuerpo de una bebé de nueve meses fue localizado enterrado en el patio de una casa de la colonia Mesa Colorada, en Zapopan.

Fue alrededor de las 10:00 horas de este miércoles 2 de febrero cuando vecinos de la zona reportaron a las autoridades que percibieron olores fétidos provenientes de una finca.

Según los reportes, la finca en cuestión se encuentra en la calle Ricardo Chávez Pérez, casi en el cruce de la calle Alberto Mora López, de la colonia Mesa Colorada en Zapopan.

Por lo que minutos más tarde, elementos de la policía municipal de Zapopan arribaron al lugar, y al interrogar a los habitantes de la casa, sus declaraciones resultaron contradictorias.

Al levantar sospechas sobre el paradero de una bebé de recién nacida, su madre terminó por confesar que su hija había muerto y fue enterrada en el patio de la casa.

Por lo que se requirió la presencia del personal ministerial de la Unidad Especializada en Investigación de Feminicidios de la Fiscalía del Estado para iniciar las indagatorias.

Asimismo, personal del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses se encargó de trasladar el cuerpo de la bebé al anfiteatro de la zona metropolitana para que se le realice la necropsia correspondiente.

Jalisco: Familiares de la bebé hallada muerta fueron detenidos

La Fiscalía de Jalisco informó que abrió una carpeta de investigación para esclarecer la muerte de la bebé de nueve meses de edad, cuyo cuerpo fue hallado enterrado en el patio de la casa.

Las autoridades informaron que los familiares de la bebé quedaron detenidos mientras se efectúa la investigación de los hechos.

Así, el padrastro, la madre y el abuelo de la bebé quedaron a disposición de un agente del ministerio público.

Los reportes indican que al padrastro le fue decomisada una pistola y varios cartuchos.

Este hallazgo del cuerpo de la bebé en Jalisco ocurre unas semanas después de que el cuerpo del bebé Tadeo fue encontrado entre la basura del Penal de San Miguel en Puebla.

Dicha situación rápidamente generó la indignación de diversas organizaciones defensoras de los derechos humanos, quienes exigieron justicia para el bebé.

Tras varios días de investigación, se logró reconocer la identidad del bebé de 3 meses y se determinó que fue robado de un cementerio de Iztapalapa, CDMX.