México.- Hace unos días, Andrés ‘N’ fue detenido por el delito de feminicidio en Edomex; en este caso, identificado como el feminicida de Atizapán, hubo filtración de fotos e información que impactan en las víctimas y el acceso a la justicia.

Las filtraciones de fotos y datos por parte de autoridades (fiscalías y policías) a medios de comunicación son una práctica lamentablemente común que repercute también en la sociedad.

Especialistas consultadas por SDPnoticias dan cuenta de la serie de consecuencias que tiene la filtración, entre ellas, que las investigaciones puedan quedar impunes y las víctimas sin justicia.

Protesta en Atizapán, Edomex

Las filtraciones son revictimización y ponen en riesgo la justicia

En el caso del feminicida de Atizapán, luego de que la Fiscalía del Estado de México reportó la detención de Andrés ‘N’ por el feminicidio de Reyna González, circularon otros datos.

Éstos, fueron fotos filtradas a medios sobre las identidades de otras posibles víctimas de esta misma persona, pues hallaron diferentes pertenencias en el domicilio.

Este tipo de datos son considerados como indicios o “pruebas” porque fueron hallados en el lugar de los hechos y pueden comprobar que la persona imputada es responsable de lo que le acusan.

Sin embargo, que el Estado no garantice el resguardo de estos indicios es revictimización y está reconocida por las leyes en la materia, donde lo identifican como violencia institucional, según señaló Edith Olivares, directora de Amnistía Internacional.

“El Estado está, de alguna manera, violentando a las familiares de las víctimas porque no garantiza que puedan acceder a la justicia”.

Edith Olivares, directora de Amnistía Internacional

De acuerdo con la maestra Olivares, el Estado mexicano incurre en faltas al debido proceso desde hace años, sobre todo en feminicidios, donde hay registro de estas fallas desde los casos de Ciudad Juárez en los años 90.

La dignidad de las víctimas afectada por las filtraciones

Las filtraciones también impactan en la dignidad de las víctimas y de sus familiares, expresó para SDPnoticias la colectiva Mujeres+Mujeres.

“La explotación de imágenes y detalles en torno al crimen hace que la muerte de una persona en condiciones violentas trascienda más que su vida, al menos en la memoria pública. Para sus familias es poner sal en la herida, agravar su dolor y dificultar sus demandas para obtener justicia”.

Mujeres+Mujeres

Mujeres+Mujeres coinciden en que las filtraciones son una forma de revictimización porque no atienden ni protegen a las víctimas, sino que violan sus derechos y exponen a las familias a más sufrimiento.

Asimismo, Xóchitl Arzola, presidenta de la organización Mujeres en Cadena, señaló que las filtraciones son malas prácticas que tienen un impacto también en las comunidades porque, a la largo, generan desconfianza en las autoridades y las demeritan ante la falta de justicia.

En México, durante el primer trimestre de 2021, se registraron al menos 949 asesinatos de mujeres, de los cuales sólo 234 fueron clasificados como feminicidios.

En el Estado de México, contabilizaron 102 asesinatos en el mismo periodo. Y desde 2015, al menos dos mil 466 mujeres han sido asesinadas en esta entidad.

Domicilio del feminicida de Atizapán

¿Por qué las filtraciones podrían afectar el debido proceso?

Andrés ‘N’ fue vinculado a proceso el pasado 20 de mayo por el delito de feminicidio que habría cometido contra Reyna González, sin embargo, la justicia no se puede garantizar cuando hay filtraciones.

Lo anterior, explicado por Edith Olivares, sucede porque las filtraciones pueden comprometer el proceso judicial al hacerse públicas, de manera filtrada, algunas de las “pruebas” contra las personas imputadas.

Los imputados pueden argumentar que han violado sus derechos con las filtraciones porque no se respeta la presunción de inocencia, principalmente, y eso puede ocasionar impunidad.

“Hay una violación al derecho del imputado y eso afecta directamente a las víctimas y a la sociedad en su conjunto porque fortalece o abre camino a la impunidad. Por eso es muy riesgoso que se filtren o se hagan públicas algunas de las pruebas que tiene la Fiscalía”.

Edith Olivares, directora de Amnistía Internacional

En este sentido, la colectiva Mujeres+Mujeres insistió que esta lamentable práctica persiste porque hay impunidad también al interior de las instituciones al no sancionar a los responsables de las filtraciones.

Mientras que Arzola resaltó que al pasar de los años, la situación de violencia contra las mujeres no está cambiando y “vivimos en un país lleno de impunidad, donde se mata a las mujeres porque se puede, les importamos poco y no importa si desaparecen o matan a una, 10, a 20, a 30″.

¿Quiénes son los responsables de las filtraciones?

Las fotos sobre las identidades de otras posibles víctimas de Andrés ‘N’ fueron filtradas por personas que llegan a asegurar el lugar de los hechos, que sería personal de la Fiscalía.

Entonces, aunque se podría decir que estos servidores públicos son los responsables, es la Fiscalía del Edomex y todas las del país quienes deben asumir las consecuencias como instituciones.

De esta manera lo reiteró la directora de Amnistía Internacional, pues señaló que es responsabilidad de las fiscalías tener servidores responsables con la capacidad para distinguir lo que podrían afectar un proceso.

“Muchas veces, sobre todo en México, se recurre a señalar a las personas que directamente cometieron una falta pero la responsabilidad es la institución y no individual; la cadena de mando que podrían estar involucrada o los altos mandos que no están vigilando”.

Edith Olivares, directora de Amnistía Internacional

Al no ser casos aislados (se pueden retomar los feminicidios de Ingrid Escamilla y Karla Pontigo), Olivares reiteró que las fiscalías tienen que investigar a todas las personas que pueden estar incurriendo en estos actos.

Mientras que la colectiva se pronunció por la aplicación de sanciones para garantizar la no repetición y erradicar estas prácticas al interior de las instituciones de procuración de justicia.

Protesta en Atizapán
Un forense entra a la casa del feminicida de Atizapán

Feminicida de Atizapán: un caso “escándalo”

El feminicida de Atizapán en pocos días se convirtió en un caso conocido, prácticamente, por todo el país debido a la cobertura mediática y a la información compartida por redes sociales.

Aunque bastante información fue producto de las filtraciones, medios y la sociedad en general, dejan de lado que puede ser un caso “de escándalo y morbo”.

Arzola mencionó que una situación importante es abandonar el uso de la palabra “monstruo” se enfocan en la persona detenida y se crea una historia de un “mundo irreal, de fantasía” pero dejan fuera la responsabilidad penal.

“La atención está focalizada en otras cosas y no en atender un problema real y social; qué fue lo que pasó, qué llevó a un señor a matar a una mujer. Esto se convierte en un circo, pues tenemos un monstruo porque es el malo y se comienza a romantizar el caso. Dejemos de llamarlos monstruos porque son personas que han cometido delitos”.

Xóchitl Arzola, Mujeres en Cadena

Según M+M, este “espectáculo” se sobreponen a los problemas estructurales y se descontextualiza “para darle peso a detalles personales de las víctimas”.

Y por el tipo de impacto que ha tenido en la opinión pública, Amnistía Internacional considera que la investigación debe responder al proceso judicial en las condiciones en que públicamente se ha hecho.

“No basta con salir a hacer una suerte de ‘escándalo’ con actos que comete una persona, sino que hay que garantizar que la investigación sea robusta para poder terminar el proceso judicial”.

Edith Olivares, directora de Amnistía Internacional

De lo contrario, sucederá que detuvieron a Andrés ‘N’, el caso tuvo un revuelo por su relevancia pero la Fiscalía no hace la investigación y termina en impunidad.

La responsabilidad de medios de comunicación en casos como el feminicida de Atizapán

Cuando un caso como el feminicida de Atizapán ocurre, los medios de comunicación realizan coberturas amplias que pueden caer en sensacionalismo que afecta a diferentes sectores.

Con cualquier tipo de información, los medios tienen la responsabilidad ética sobre los contenidos que van a publicar y las narrativas que manejan para presentar sus escritos.

Según Mujeres+Mujeres, un criterio para publicar o no es el interés público de los contenidos, y en este caso [feminicida de Atizapán], por ética periodística los medios deberían tener presente, más que nunca, su responsabilidad de proteger los derechos humanos y no contribuir a la violación de los mismos.

Sobre ello, Xóchitl Arzola resaltó la necesidad de que los medios y periodistas sean capacitados en perspectiva de género y derechos humanos pues hay contenido que supera algunos “límites”.

“Las fotos que filtraron son las primeras imágenes que fueron publicadas; muchas veces esto abona al morbo y envicia el proceso. Está bien que la familias se enteren pero no es su responsabilidad, las fiscalías debe buscar a esas familias”.

Xóchitl Arzola, Mujeres en Cadena

Edith Olivares refirió que también hay responsabilidad del Estado para que, sin afectar la libertad de expresión, se analice cómo dar información sin estereotipos ni sensacionalismo, y se enfoquen en violaciones a los derechos humanos.