Una empresa le ganó al SAT, pero, ¿cómo lo hizo? Se trata de una compañía de Guadalajara que pudo demostrar que no es facturera. Es decir, que no usaba comprobantes falsos de operaciones inexistentes como se le notificó cuatro años atrás.
La empresa de Guadalajara, Jalisco, señalada como facturera, se dedica a distintos servicios profesionales, científicos y técnicos. La notificación del SAT llegó a través del Buzón Tributario desde abril de 2019, pero cobró efecto 5 meses después.
El SAT le notificó la sospecha a la empresa de Guadalajara, de manera individual, de que usaba Comprobantes Fiscales Digitales por Internet (CFDI) con el objetivo de respaldar operaciones sin sustento, en otras palabras, ser una compañía facturera.
Sin embargo, dicha empresa logró demostrar lo contrario.
Empresa de Guadalajara le gana al SAT, pero en los comprobantes fiscales señalados
La empresa de Guadalajara logró demostrar ante el SAT que no es facturera después que el órgano tributario emitiera una notificación en 2019, que un año después se convirtió en resolución definitiva y la empresa respondió.
De hecho, el nombre y RFC de la empresa de Guadalajara, fueron publicados en el portal del SAT y luego en el Diario Oficial de la Federación (DOF). En ese sentido, la compañía contaba con un plazo establecido para desvirtuar los hechos.
La empresa logró demostrar lo contrario ante el SAT, pero, si bien el órgano reconoció lo anterior en cuanto a los hechos consignados en el oficio de presunción y de resolución definitiva, solamente fue en relación a dichos comprobantes fiscales.
¿Qué son las empresas factureras? Esto dice el SAT
Las empresas factureras, como en el caso que señaló el SAT en Guadalajara, son aquellas que emiten comprobantes fiscales que amparan operaciones que no existen. El propósito de estas compañías es pagar menos impuestos o lavar dinero.
Los comprobantes que emiten amparan actividades inexistentes para los que la empresa emisora no cuenta con infraestructura o personal para realizar la actividad. De esta forma pueden disminuir utilidades y pagar menos impuestos.
“Nosotros hemos encontrado diferentes empresas factureras. Algunas que simplemente se dedican a aumentar falsamente los gastos con servicios o bienes inexistentes, pero muchas veces estas empresas vinculadas con las dos actividades. O sea no solamente inventan facturas de gastos falsos, sino también llevan facturas para encubrir ilícitos”
Raquel Buenrostro, Jefa del SAT
La empresa facturera no paga impuestos, es difícil de ser localizada y no tiene empleados. Al llegar a sus ubicaciones declaradas se encuentran baldíos, casas ajenas al negocio o la dirección no existe. Estas son también empresas fantasma.
“Al principio, la incidencia estaba en temas de comercio al mayoreo, construcción, comercio al menudeo e industrias manufactureras. A medida que pasa el tiempo nos hemos dado cuenta que la tendencia es que se va al área de servicios, porque los servicios son más difíciles de comprobar”.
Raquel Buenrostro, Jefa del SAT