Cristina Lara, investigadora de la BUAP, estudia los mecanismos de regulación de la bacteria Escherichia coli enteropatógena (EPEC).
Esta es uno de los principales agentes que provocan diarreas infecciosas en menores de cinco años.
Además, tiene la capacidad de expresar factores de virulencia que causan daño en los infantes, informó la especialista de la BUAP.
Consecuencias de la bacteria EPEC su impacto en la salud infantil
La investigadora Cristina Lara busca identificar reguladores negativos que reprimen los factores de virulencia de EPEC.
Esto podría llevar al desarrollo de compuestos alternativos para tratar las diarreas sin afectar la microbiota intestinal, a diferencia de los antibióticos tradicionales.
La experta de la BUAP explicó que EPEC, presente en agua y alimentos contaminados, afecta principalmente a niños, provocando diarrea, fiebre, vómito y desnutrición.
Dichos efectos se deben a la alteraciones del epitelio intestinal, lo que dificulta la absorción de nutrientes en los menores.
Compuestos anti-virulencia como alternativa a los antibióticos
Con base en análisis de proteómica, se identifican 30 posibles reguladores con efecto negativo sobre los genes de virulencia.
Los compuestos anti-virulencia derivados de la investigación de la BUAP se centrarían en inactivar los factores que causan daño, permitiendo que el sistema inmunológico elimine la bacteria de forma natural.
Al respecto, Cristina Lara destacó la necesidad de buscar alternativas ante la creciente resistencia de los microorganismos a los antibióticos.
Estos compuestos no matarían a la bacteria, pero sí evitarían su capacidad de mutación y resistencia, lo que representa una estrategia innovadora para combatir enfermedades infecciosas.
El siguiente paso es utilizar herramientas bioinformáticas y moleculares para caracterizar cómo los reguladores negativos reprimen los factores de virulencia en EPEC.