Cuando en la escuela, específicamente en la materia de literatura, nos explicaban el arte a través de la historia, se hacía bastante tedioso, la explicación de las peculiaridades de cada una de las corrientes literarias y artísticas.

Desde pinturas rupestres en la prehistoria, pasando por la edad antigua con la incursión de los egipcios, siguiendo con la Edad Media y lo gótico, para que el Renacimiento en la edad moderna diera paso a nuestra era contemporánea.

Uno de los personajes emblemáticos del neoclasisimo era Angélica Kauffman una joven suiza que comenzó su carrera a los 12 años como pintora. 

Neoclasicismo a la Kauffman…

-A lo largo de su vida pisó tierra inglesa e italiana, recordando que de éste último país proviene la corriente Neoclasicista.

-Años más tarde fue una de las fundadoras de la Real Academia de las Artes en Londres, como podemos leer, una fémina inteligente y astuta.

-Ella era peculiar, por ser una dama educada y culta así como estética, semejante al neoclasicismo; en sus pinturas reflejaba lo racional de una manera clara y sencilla.

-Fusionaba el equilibrio que era una parte esencial en este movimiento a través del jugueteo de luces y colores implícitos en cada una de sus pinturas, el contraste de sombras, el dinamismo de las escenas, distintas tonalidades se hacían dignos de representar, recordando los referentes a las culturas griegas y romana.

El neoclasicismo de Angélica Kauffman mujer con capacidad que hizo historia en el medio artístico y dejó un amplio legado de obras dignas de recordar y admirar.