Autoridades chinas anunciaron que el campamento que tienen instalado en el Monte Everest, cerrará sus puertas debido a las toneladas de basura que el turismo masivo deja a su paso. 

Y es que según informó la agencia Xinhua, el gobierno tibetano recolectó más de 300 toneladas de residuos durante el año pasado, sólo en el área más visitada por los turistas no especializados. Para la tarea se han contratado a miles de personas, pero los esfuerzos son insuficientes. 

Por eso, luego de que el campamento chino en el famoso monte recibiera más de 40 mil visitantes por año, cifra que no es sorprendente pues a él se puede llegar en auto, ahora sólo habrá autorización para que entren 300 personas. 

Esta medida no afectará a los verdaderos alpinistas que suelen subir por otro camino hasta el campamento base de Nepal al cual puede llegarse luego de caminar entre 10 y 15 días. 

Se informó también que se establecerá una nueva “ciudad de tiendas de campaña” para que los “turistas comunes” puedan ver la montaña a dos kilómetros del antiguo campamento.