En México se leen apenas 3.8 libros al año por persona, esto, si lo comparamos con los 47 libros que leen los japoneses cada año, es un número verdaderamente bajo, pero ¿por qué los mexicanos no leen? Según un informe publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía a finales de 2018, la mitad de los mexicanos aseguran que no leen más por falta de tiempo. 

Quizá otra de las razones que la gente podría dar sobre por qué no leen más, sería el costo de los libros que muchos consideran elevado o excesivo. 

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Sobre eso se levantó un debate en Twitter luego de que una librería publicara la carta que a su vez, otra librería escribió para explicar llanamente y sin complicaciones, por qué los libros no son tan caros como parecen. 

"Vale que aproveches estos días para viajar a Estambul, Londres o París”, dice la carta refiriéndose claramente a temporada vacacional. “Vale que te gastes medio sueldo en invitar a comer a la familia en el restaurante de cocina fusión aragonesavascaperuanajaponesa de la esquina. Vale que el otro medio te lo gastes con los colegas atizándote gintonics de ginebra con aromas florales y tónica de agua fósil a los que se les añaden todas las especias de la historia de la humanidad y medio pepino”, continúa. 

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“Vale que le compres al niño los tenis que lo convertirán en el nuevo Nadal o el móvil con cinco cámaras de nueva generación. Vale que pagues por ir al fútbol e insultar”, sigue la retahíla. 

Todo esto es una válvula de escape que la persona que escribió la carta encontró para mostrar la frustración que siente cuando alguien dice que un libro es caro. 

Aunque hay quienes no coinciden con esta visión de las cosas, la acción y las palabras han sido aplaudidas hasta el cansancio en redes sociales y entre las opiniones destacan las que explican todo el proceso por el que tiene que pasar un libro antes de llegar a un estante y todas las personas que están involucradas en él.