En el marco del 1 de febrero, Día Nacional del Ajolote, te contamos por qué el ajolote mexicano está en peligro de extinción y cómo contribuye el ser humano en ese problema.
El ajolote es una de las especies representativas de México y en las últimas fechas se ha vuelto popular por su gloriosa presencia en el nuevo billete de 50 pesos.
Todos andamos en busca de nuestros “ajolopesos”, aquel bello billete morado, y si los encontramos preferimos guardarlos antes que gastarlos.
Sin embargo, no es el billete el que tenemos que cuidar, pues el ajolote está en peligro de extinción desde hace varios años.
Por ello, científicos y protectores de animales trabajan para conservar al ajolote mexicano, especie endémica de nuestro país e ícono de la cultura nacional.
Ajolote: Todo lo que debes saber de esta especie en peligro de extinción
El ajolote es una especie endémica de la Cuenca de México, cuyo nombre de origen náhuatl significa “monstruo de agua”.
Los ajolotes mexicanos son anfibios que forman parte de la familia de los ambistomátidos, también conocidos como “salamandras topo”.
Estos animales tienen una vida subterranea y se desplazan en el agua cuando llega el momento de reproducirse.
A diferencia de otros anfibios, el ajolote no puede realizar metamorfosis en estado silvestre.
La capacidad regenerativa de los ajolotes se descubrió en 1769 por el naturista italiano Lazzaro Spallanzani.
Cada ejemplar de ajolote tiene un genoma de 32 mil millones de pares bases, 10 veces más que el genoma humano.
En México, existen 18 especies de ajolotes y, en promedio, miden 25 centímetros de largo. Estos animales respiran por sus ramas branquiales.
Actualmente, los ajolotes se encuentran en peligro critico de extinción.
Ajolote: ¿Por qué la especie está en peligro de extinción?
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) considera que el ajolote, anfibio endémico de México, está en grave peligro de extinción desde 2006.
Esto se debe a que los canales y aguas antiguas de la Cuenca de México están llegando a niveles muy bajos.
Esta situación representa un peligro para el ajolote, pues solo en aguas profundas le es posible depositar sus huevos.
Además, los desechos como aguas residuales contaminan el hábitat natural del ajolote.
Recordemos que los ajolotes se concentraban, principalmente, en el lago de Xochimilco, CDMX.
Actualmente existen varios santuarios y criaderos ubicados en la zona metropolitana del país que se dedican a preservar al ajolote mexicano.
Sin embargo, también existe la compra y venta ilegal del ajolote en México.
Por ello, te invitamos a no comprar ejemplares de esta especie en peligro de extinción; los ajolotes no son mascotas.