Ahora que a todo mundo nos preocupa más lo que comemos y buscamos una vida más saludable, te traemos una recomendación con muchos beneficios a la salud. Se trata del jengibre, una raíz asiática cuyo sabor ha cautivado a las cocinas de todo el mundo.

Esta raíz tiene un aroma a limón y un toque picante, lo que la hace un ingrediente especial para algunos platillos que necesitan un toque exótico para mejorar su sabor; sin embargo, no es lo único que llama la atención del jengibre, sino sus beneficios medicinales.

El jengibre se ha utilizado desde hace siglos en la medicina tradicional china para tratar resfriados, dolores de estómago, náuseas, indigestión, estreñimiento y diarrea. Pero, aquí te diremos 5 cosas más que esta raíz puede remediar y que están científicamente comprobados:

El jengibre contiene docenas de sustancias naturales que combaten la inflamación como el gingeroles. La capacidad de los alimentos para reducir la inflamación es importante, ya que ésta contribuye a muchas condiciones crónicas, como la obesidad, diabetes, el dolor y enfermedades al corazón.

El jengibre también tiene potentes efectos antioxidantes. Eleva los niveles de glutatión antioxidante del cuerpo, que ayuda a controlar la oxidación de las células que son parte del proceso de envejecimiento.

Las investigaciones demuestran que el té de jengibre ayuda a prevenir trastornos metabólicos y reduce la sensación de hambre, lo que significa que tiene un papel importante en el control de peso.

El jengibre y sus componentes bioactivos, tales como gingeroles y shogaoles, estimulan la producción de células sanguíneas en el cuerpo y mejoran los síntomas de la anemia.

Un estudio demostró que el jengibre puede mejorar el azúcar en la sangre en ayunas en pacientes diabéticos tipo 2. Los científicos han descubierto que la combinación demiel y jengibre reduce el estrés oxidativo, así como las complicaciones de la diabetes.

Con información de iMujer.