Los canguros, igual que los animales domésticos, son capaces de comunicarse “intencionalmente” con los humanos, por ejemplo, para pedir ayuda. Así lo afirma un nuevo estudio realizado por expertos la Universidad de Roehampton de Londres y de la Universidad de Sydney.

Como parte de la investigación, publicada este miércoles 16 de diciembre en la revista Biology Letters, los científicos encomendaron a los canguros una ‘tarea de un problema sin solución’, ofreciéndoles comida guardada dentro de un recipiente de plástico.

Los canguros pidieron ayuda a los humanos para abrir cajas con comida

Tras varios intentos sin éxito para abrir las cajas, los canguros se acercaron a un humano que estaba cerca y les lanzaron una mirada especial, pero cuando no lograron su atención, incluso lo empujaron o arañaron para pedir ayuda, señalaron los investigadores.

“Su mirada era bastante intensa”<br>

Alexandra Green, coautora del estudio<br>

El estudio detalla que 10 de los 11 canguros evaluados en el estudio observaron “activamente” a la persona que había colocado la comida en el recipiente de plástico para obtenerla. Nueve de los 11 animales incluso mostraron una “forma elevada de comunicación”, alternando su mirada entre el contenedor y la persona presente.

Alexandra Green, investigadora posdoctoral de la Universidad de Sydney y coautora del estudio, destacó en un comunicado que antes de su investigación, se pensaba que los animales domésticos eran los únicos que acudían a los humanos cuando necesitan ayuda con un problema.

“Pero los canguros también lo hacen. Si no pueden abrir la caja, miran al humano y después al contenedor. Algunos de ellos usaron su nariz para empujar al humano. Y algunos se acercaron al humano y comenzaron a arañarlo pidiendo ayuda”<br>

Alexandra Green, coautora del estudio

Con base en sus hallazgos, los investigadores creen que los canguros, considerados animales sociales, como los perros y las cabras, pueden adaptar su comportamiento para interactuar con los humanos sin necesidad de ser domesticados.

“Pudimos ver que la comunicación entre animales se puede aprender. Y que el comportamiento de mirar a los humanos para acceder a los alimentos no está relacionado con la domesticación”<br>

Alan McElligott, autor principal

Con información de CNN