Lolita es una orca asesina que vive en cautiverio desde hace 47 años  en el que se considera “el tanque más pequeño de los Estados Unidos para una orca”; por tal razón, el alcalde de Miami, Philip Levine, encabeza la petición de liberarla lo antes posible, a través de una resolución simbólica de la Comisión de Miami Beach para que vuelva a su hábitat.

Esta petición se une a una lucha legal que lleva años, promovida por People for Ethical Treatment of Animals (Peta). El mandatario publicó en Twitter que “El trato correcto a los animales no es un truco político”, haciendo un llamado a Andrew Hertz, administrador del Miami Seaquarium, a hacer “lo correcto”.

Separada de su familia a los 4 años de edad en 1970, fue incluida en una lista federal de animales protegidos en el marco de la Ley de Especies en Peligro (ESA) del país, pero su liberación depende del acuario.

La semana pasada, la Comisión de Miami Beach votó por unanimidad una resolución presentada por el alcalde Levine, quien anunció que iba a solicitar el apoyo de todos los alcaldes de Florida para presionar por la liberación de Lolita de su “pequeña e insegura prisión”, la cual es promovida con el hashtag #Mayors4Lolita y #FreeLolita.

Hertz ha señalado que no hay evidencia científica de que la orca podría sobrevivir si fuera trasladada a “aguas abiertas del noroeste del Pacífico”.

Con información de AFP.