A poco más de un año del inicio de la pandemia de Covid-19, una de las preguntas que continúa preocupando a los ciudadanos es: ¿cómo lavar los cubrebocas de tela? Por ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó en un video algunas recomendaciones acerca de estos productos de protección.
Esto, porque el gasto económico que representan, conlleva que las personas en ocasiones prefieran usar cubrebocas lavables que puedan volver a utilizar. Así que aquí te desglosamos la explicación de la OMS acerca de cómo lavar los cubrebocas de tela.
Recomendaciones de la OMS sobre cubrebocas lavables
Por principio de cuentas, la OMS recomienda que tus cubrebocas lavables sean de triple tela y no dispongan de válvulas, ya que estas te protegen a ti del Covid-19, pero no a las personas que se encuentran a tu alrededor. Asimismo, sugiere que esta garantice al menos un 70 por ciento de filtración de pequeñas gotas. Para ello, es importante que sepas cómo debería ser cada capa:
- 1. Capa interior: Es la que está en contacto con la boca, debería ser de algodón absorbente.
- 2. Capa intermedia: Para protegerte, debe estar fabricada de polipropileno hilado, no tejido.
- 3. Capa exterior: Es la que se ve cuando la traes puesta y puede ser de polipropileno o de un poliéster resistente a la humedad.
De la misma manera, el cubrebocas lavable (de tela) debe cubrir no sólo la nariz y la boca, sino también la barbilla sin dejar aberturas. Por ende, la OMS no recomienda usar dos mascarillas con el objetivo de sumar más capas, pues esto dificultaría tu respiración y provocaría que te las tengas que quitar a menudo.
¿Cómo lavar el cubrebocas de tela, según la OMS?
De acuerdo con la OMS (Organización Mundial de la Salud), un cubrebocas lavables (de tela) bien hecho conserva las propiedades de por lo menos cinco ciclos de lavado, pero aún así deben limpiarse diariamente, no solamente dejarlo ventilar para su siguiente uso.
¿Cómo lavar los cubrebocas de tela? Se recomienda dejarlos en agua hirviendo durante un minuto o su proceso de lavado con jabón y detergente, preferiblemente a 60 grados. Tras ello, la OMS advierte que deben ser guardados en bolsas de plástico u otros envoltorios seguros antes y después de su uso (también, por ejemplo, si vas a comer y debes retirarlo por un momento).