La viruela del mono o viruela símica es una enfermedad infecciosa leve, causada por un virus transmitido a los humanos por animales infectados.
Tras detectarse más de 16 mil casos de viruela de mono en 74 países, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sido declarada emergencia de salud pública internacional.
¿Cómo prevenir la viruela del mono? Este virus puede propagarse a través del contacto de ropa usada por una persona infectada o el contacto directo con lesiones o heridas en la piel del enfermo.
Además, la viruela de mono puede contagiarse a través de micropartículas respiratorias, es decir, tos o estornudos.
Por ello, al igual que con el virus del Covid-19, es recomendable realizar un correcto lavado de manos para prevenir el contagio de viruela de mono así mantener una sana distancia.
También se recomienda evitar el contacto cercano con personas enfermas, incluidas las que tienen lesiones en la piel o lesiones genitales así como el contacto con artículos que las personas enfermas puedan haber usado:
- Ropa de uso diario
- Ropa de cama
- Materiales utilizados para curaciones o atención médica.
¿Cuáles son los síntomas de la viruela de mono?
Los síntomas de la viruela de mono comienzan por un dolor corporal, después comienza un dolor de cabeza fuerte, inflamación de los ganglios hasta llegar a presentar fiebre.
Después de dos o tres días, comienza la aparición de lesiones exantemáticas, como las ampollas en la piel.
La erupción puede empezar en el rostro, manos, pies, el interior de la boca o los genitales del paciente y extenderse al resto del cuerpo.
Cabe destacar que estas lesiones o ampollas son más grandes que un simple sarpullido y se caracterizan porque contienen pus.
En promedio, los síntomas de la viruela del mono aparecen dentro de los seis a 13 días posteriores a la exposición, pero pueden demorar hasta tres semanas.
Si llegas a contagiarte con la viruela del mono, hasta el momento, el único tratamiento que existe para tratar la enfermedad es en manejo de síntomas.